Ya dije que según mi punto de vista, la opción de pararse a cambiar a gomas de mojado en la última vuelta del Gran Premio no la veía del todo acertada, pero me he tomado la molestia de analizar un poco mejor la jugada con números sobre la mesa, y efectivamente, me reitero en mi opinión de que Fernando Alonso tendría que habérsela jugado a por un podium brillante.
Es cierto que la opción conservadora de cara al Mundial de Constructores era entrar a Fernando para asegurar el finalizar la carrera. Entre coger algunos puntos y un abandono, está claro lo que quiere el equipo, pero creo que un podium en Spa defendiéndose en esa última vuelta con los neumáticos de seco hubiera sido un subidón total, y me sabe mal que no se jugara esa arriesgada carta. Aquí van los números.
Una de las mejores referencias que podemos tener sobre la pista de Spa para comprobar qué podría haber hecho Alonso en caso de seguir en pista esa última vuelta es el Toro Rosso de Sebastian Vettel, que iba por detrás del asturiano, y no entró a cambiar gomas. Estaremos todos de acuerdo que, en principio, Fernando no tendría por qué no poder rodar en los mismos tiempos que Vettel en las mismas condiciones.
En el paso por meta a falta de 2 vueltas, Fernando Alonso aventajaba al alemán en 12,733 segundos. En el siguiente paso, con Alonso ya pasando por el pit lane, y por lo tanto, con una distancia reducida necesariamente por la menor velocidad que se debe llevar en el pit lane, esa diferencia era aún favorable a Alonso, pero de 4,879 segundos. En la última vuelta, Alonso gana dos plazas en el último instante y consigue un 4º que bien podría haber sido un 6º. La diferencia final con Vettel: 0,098 segundos.
Ahora veamos las evoluciones del principal peligro, Nick Heidfeld. En el paso por la última vuelta, estaba a 10,991 segundos de Vettel, y por lo tanto, a 15,870 de Alonso (pasando por boxes, recordemos). Al pasar bajo la bandera a cuadros, el alemán de BMW Sauber aventajaba a Vettel en 5,193 segundos. ¿Qué quiere decir esto? Que seguramente, de haberse quedado Alonso en pista, y haber finalizado la carrera (dato importantísimo y crucial), Heidfeld habría acabado probablemente pegadito a Alonso, pero a su estela, porque el asturiano hubiera pasado unos 10 segundos por delante de Vettel en la penúltima vuelta de no haber entrado a boxes (se pierden unos 5 segundos en la vuelta de entrada a boxes por la reducción de velocidad en el pit lane y la entrada), o lo que es lo mismo, unos hipotéticos 5 segundos por delante de Heidfeld en meta.
Y luego está la pregunta: ¿y si hubieran parado los Toro Rosso en la última vuelta a poner gomas de mojado, no hubiera cambiado la cosa? Pues tampoco. Por tener una referencia, Heidfeld hizo en la última vuelta un 2:01.305, mientras que Vettel, por ejemplo, rodó en un 2:17.489. Esos 16 segundos de diferencia no compensan una parada de algo más de 20 segundos. No para una sola vuelta.