Poco tiempo ha durado la emoción para McLaren Honda en el Gran Premio de España. Después de que Fernando Alonso no terminase ninguno de los cuatro primeros Grandes Premios de la temporada, en la primera sesión de entrenamientos libres del viernes en Montmeló, ha tenido que parar su MCL32 en la vuelta de instalación.
El piloto asturiano parece que está perdiendo la poca paciencia que le quedaba. En la rueda de prensa previa al evento, aseguró que se tendrá que pensar su renovación con McLaren Honda antes del final de la temporada, dando rienda suelta a los rumores que le sitúan de nuevo en Ferrari.
Sea en Ferrari, o cualquier otro equipo, Fernando Alonso necesita nuevos retos en la Fórmula 1. Los fallos en su McLaren no sólo le impiden puntuar y terminar carreras, ya ni siquiera es capaz de rodar en una sesión de entrenamientos completa. Y sin kilometraje, no hay datos. Y sin datos, soluciones.
La imagen del español agachado mirando su monoplaza con los comisarios, era cuanto menos preocupante. Para colmo, el motor Honda tenía un agujero que ha hecho, que cuando la grúa trataba de sacar el coche de pista, comenzase a caer aceite por la parte posterior.
Tras la rocambolesca escena, Alonso se iba junto a su entrenador Edoardo Bendinelli a jugar a padel, lejos del ajetreo del Circuito de Barcelona Catalunya. En declaraciones posteriores explicaba que prefería irse a hacer algo de deporte en vez de ver la sesión por la televisión.
Por fortuna para el español, en la segunda sesión de entrenamientos libres, ha conseguido dar 21 vueltas al trazado catalán. Que haya conseguido el peor tiempo de la parrilla, resulta algo casi anecdótico, cuando el trabajo que tenía por delante era bien distinto.