Curiosa la historia que han publicado en Jalopnik esta semana sobre el desarrollo del Mercedes CLK GTR GT1 y cómo la marca alemana compró un McLaren F1 GTR y lo usó de forma descarada como mula de desarrollo para el arma que derrocaría al coche de su socio británico en los grandes años de los GT1. Según cuentan, la caída del DTM/ITC obligó a Mercedes-Benz a acelerar sus planes de desarrollo para el CLK GTR, de ahí que decidiera comprar el McLaren F1 GTR de Larbre Compétition, en el cual alargaron la trasera, que empezaba a asemejarse vagamente a lo que sería finalmente el CLK GTR, y montaron su motor AMG V12 de seis litros en lugar del BMW que llevaban los F1 GTR. Para la anécdota queda el accidente que sufrió a manos de Bernd Schneider en El Jarama.
Tras el éxito del CLK GTR y el fracaso del CLR GT1 (un saludo a los responsables de marketing), el McLaren 'Mercedes F1 CLK GTR' fue subastado vestido de coche de calle y con su motor original, sin que nada haga pensar que algún día fue maltratado y machacado en test para derrotar a los de su misma especie...
Vía | Jalopnik
