El futuro de la Fórmula 1 ya está sellado. El pasado miércoles se celebró una reunión decisiva entre todos los equipos, la FIA y representantes de Liberty Media en el que se dio el empujón definitivo al reglamento técnico que, salvo que haya nuevo cambio en el calendario, debería darse a conocer al público el próximo día 31.
Pero además del reglamento de 2021, también estaban en el aire posibles novedades de cara a la próxima temporada. Especialmente las carreras cortas clasificatorias con parrilla invertida, que en Liberty Media estaban empeñados en aplicar en ciertas carreras. Sin embargo la organización no ha encontrado el apoyo de los equipos.
Más concesiones aerodinámicas para los equipos
La Fórmula 1 ya tenía ideado el plan. Habría carreras clasificatorias con parrilla invertida en Francia, Bélgica y Rusia, tres circuitos a los que se llega con el campeonato ya avanzado, en los que suele haber pocos adelantamientos pero en los que sí que hay buenas opciones reales de que éstos se produzcan.
Aunque no ha trascendido el resultado de la votación, bastaba con que un equipo estuviese en contra de la medida para que no saliese adelante. Tenía que haber unanimidad. Esto no quiere decir que quede totalmente descartada la medida, ya que si el equipo o los equipos contrarios a ella cambian de opinión antes del inicio del campeonato podría retomarse.
En lo que sí que hubo unanimidad por parte de los equipos fue en aceptar el cambio de nombre de Toro Rosso. La escudería filial de Red Bull pasará a llamarse Alpha Tauri a partir de la próxima temporada, dando por finalizada una etapa de catorce temporadas en las que Toro Rosso ha estado presente en la parrilla.
También la FIA hizo ciertas concesiones a los equipos de cara al reglamento técnico de 2021. Habrá algunos pequeños cambios que concedan más libertad aerodinámica a los equipos, que ya se temían que les sería imposible marcar la diferencia en este aspecto. Además se aumentará el tamaño de los endplates para dejar más espacio para los patrocinadores.
En el apartado del motor se estudió la posibilidad de congelar por un tiempo el desarrollo de los propulsores, sin sacar ninguna conclusión al respecto. También se habló de estandarizar las piezas del sistema de frenado con el fin de abaratar costes, pero se encontró con la oposición de más de la mitad de la parrilla, entre ellos los tres grandes.
En un último punto, incluso se valoró la posibilidad de que el nuevo reglamento técnico entre en vigor en 2022, en lugar de un año antes, como está previsto. Sin embargo es algo que se ha descartado. Pese a los retrasos acumulados, parece que habrá una nueva Fórmula 1 a partir de 2021, con nuevos coches e incluso nuevos equipos.
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