Apenas hace un par de semanas, en el marco del Gran Premio de Mónaco, Bernie Ecclestone espetó un "NO" rotundo cuando le preguntaron sobre la posible vuelta del Gran Premio de Francia a la Fórmula 1. Días antes parecía un hecho volver a ver a los galos en el calendario. Desde el punto de vista del espectador europeo es raro ver que Francia no esté presente, a pesar de contar con tres pilotos nacionales, la competente Federación Francesa de Automovilismo (FFSA) y la presencia de una marca como Renault. Una vez se marchó delo calendario comenzaron los rumores de vuelta. A veces a Paul Ricard y otras a Magny Cours. Pero el apoyo político no ha llegado nunca.
Para aclarar la situación nos hemos puesto en contacto con el Circuito de Magny Cours, donde hace seis años un Felipe Massa dispuesto a luchar por su primer título mundial logró la última victoria hasta ahora en suelo francés. Hablamos con Serge Saulnier, el actual director del trazado, que pelea por traer de vuelta la Fórmula 1. La primera pregunta es obvia y directa: Se dice que están tratando de que la F1 vuelva a Francia, ¿es eso cierto? "Sí, es lo que estamos intentando". ¿Y en qué punto están las negociaciones? "Estamos discutiendo con la FOM las garantías que tenemos que darles". Magny Cours lleva esta vez la delantera a Paul Ricard en la carrera por acoger el GP.
El eterno debate entre los dos circuitos es saldado por Saulnier simplemente con "nosotros tenemos el apoyo y una mayor capacidad para acoger público". Pero no es suficiente, el mayor problema es que la F1 es Francia se concibe como un gasto añadido en las arcas del Gobierno, y eso no está bien visto, motivo por el que las empresas no terminan de apoyar el proyecto.
Está Renault, la FFSA, Total, y quizás pronto Michelin. No lo apoyan porque la F1 es políticamente incorrecta en Francia, tanto para los políticos como para la gente. Es un deporte que cuesta dinero y no se percibe como un desarrollo tecnológico.
¿Pero, y más allá del dinero, necesita la Fórmula 1 a Francia? "Sí, Francia es un mercado de sesenta y cinco millones de habitantes, lo que es muy importante para los derechos televisivos", admite el directivo. Saulnier tiene claro que la F1 debería volver a Francia. Tampoco queda duda de que ellos seguirán luchando por traerla de vuelta a un circuito que sigue abierto, acogiendo carreras nacionales e internacionales y esperando el nuevo rugido de los V6 Turbo de la Fórmula 1.