Quizás no sea tan conocido como los Fernando Alonso, Pedro de la Rosa o Marc Gené pero estoy seguro que los más aficionados coincidirán conmigo en que Antonio Albacete es uno de los mejores pilotos que ha dado nuestro país. El madrileño tuvo la mala suerte de crecer deportivamente en una época marcada por las dificultades para los jóvenes, y talentosos, pilotos españoles. Su sueño de llegar a la Fórmula 1 se truncó.
Pero a pesar del revés, Albacete recondujo su carrera y encontró en las carreras de camiones su hogar. De la mano de CEPSA llegó a las carreras de camiones y más de tres lustros después, en su palmarés lucen tres títulos y cuatro subcampeonatos que este año podrían cuatro entorchados si las cosas siguen por el mismo camino. Este fin de semana, el ETRC celebra la penúltima cita del campeonato y lo hace en el trazado de casa y el patio de recreo de Antonio Albacete, el Circuito del Jarama. Hoy hemos tenido la oportunidad de charlar unos minutos con el y aquí os traemos la entrevista. Espero que os guste.
Motorpasión F1: Comencemos recordando un poco de tu intra-historia. Como casi todo buen piloto, llegaste a la competición a través del mundo del karting. De ahí a los monoplazas con la Fórmula Fiesta y con tu padre como equipo. Una época en la que el esfuerzo y el saber hacer vencía a la falta de presupuesto ¿Qué recuerdos mantienes de aquellos años?
Antonio Albacete: Son unos recuerdos muy buenos porque efectivamente con esfuerzo y con ganas se podían hacer cosas que hoy en día prácticamente no se pueden si no cuentas con un presupuesto. Yo me acuerdo de estar con mi padre, que tenía la suerte de que era preparador, haciéndonos el coche. El me ayudaba, el me lo preparaba y ahí nos ahorrábamos parte del presupuesto ya que de lo contrario hubiéramos tenido que para a alguien por ese trabajo. Nos hacíamos nosotros las cosas con ayuda de algún mecánico que trabajaba en el taller de mi padre y con eso conseguimos ganar campeonatos.
Ganamos la Fórmula Fiesta, la Fórmula Renault en el año 91…Cosas que hoy, visto como está el panorama son prácticamente impensables. Ahora tienes que tener un presupuesto acorde con las circunstancias. Ves que los equipos se reflejan en el espejo de la Fórmula 1 e incluso en cualquier fórmula de promoción ves que todo tiene que estar a imagen y semejanza de la Fórmula 1 y los pilotos igual. Entonces eso va aumentando los presupuestos y parece ser que si un equipo no va en ese nivel no es un equipo puntero y no puede obtener resultados. Todo eso es lo que se ha perdido con respecto a cuándo corríamos hace unos cuantos años.
MPF1: Y con tan sólo 18 años das el salto a Inglaterra. ¿Qué significó aquella experiencia?
A.A: Esa experiencia significó mucho porque con 18 años, irte a vivir a Inglaterra además de formarte como piloto me sirvió para formarme como persona. Estás fuera de casa, viviendo solo, con otras personas que no son tu familia. Con un idioma que prácticamente no conoces y que yo fui aprendiendo allí hablando con unos y con otros y a base de necesidad y esfuerzo. Aquello no sólo me marcó como piloto. Pero además lo que hacías en un año de competición en Inglaterra se traducía en cuatro años en España. En resumen, una experiencia muy positiva.
MPF1: Hoy en día, un piloto con 18 años ya lleva varias temporadas en el mundo de los monoplazas, e incluso con un poco de suerte ya está a las puertas de la Fórmula 1. ¿Qué ha cambiado en la forma de entender el mundo de la competición?
A.A: Ahora mismo están llegando pilotos muy jóvenes a disciplinas del automovilismo a las que antes se llegaba con más edad. Yo creo que tampoco es necesario llegar a la Fórmula 1 con 18 años. Si llegas eres afortunado y si encima te va bien, fenomenal. Pero hay tiempo y se pueden formar pilotos con más experiencia. Ves cosas en competición, incluso en la Fórmula 1, que son errores de pilotos con mucha menos experiencia. Y no estamos hablando de una copa monomarca, estamos hablando de la Fórmula 1.
La competición ha cambiado mucho en los últimos años pero ahora mismo, son así todas las disciplinas. En cuanto llevan unos años en el karting y les va bien, o funcionan bien, ya quieren dar el salto a los monoplazas. Y si puede ser un año en la Fórmula Renault, Fórmula 3 y dar el salto a la Fórmula 1, ese es el camino. A mi modo de ver, demasiado prematuro. No hace falta tener tanta prisa y se puede llegar a la Fórmula 1 con más experiencia.
Ahora mismo están llegando pilotos muy jóvenes a disciplinas del automovilismo a las que antes se llegaba con más edad
MPF1: ¿Qué acabó con el sueño de cualquier piloto de llegar a la Fórmula 1?
A.A: En mi caso fue el presupuesto el que acabó con el sueño. El dinero y el estar en una época en la que en automovilismo en España sí querías hacer cualquier cosa tenías que salir del país. Tenías que irte a Inglaterra a correr la Fórmula Ford o la Fórmula 3 porque aquí únicamente teníamos la Fórmula Fiesta y la Fórmula Nacional y si querías progresar tenías que irte fuera. Con el agravante de que no había nada de repercusión de los que hacías fuera en España y era prácticamente imposible encontrar patrocinadores.
Yo tuve la fortuna de contar con algún patrocinador, y con el esfuerzo de mi familia, para poder correr fuera pero llega un momento en el que con tu dinero y el del patrocinador llegas a un nivel pero el siguiente paso ya es imposible. El dinero se multiplica y aunque buscas el dinero en patrocinios no se puede continuar, te das la vuelta y te tienes que volver.
MPF1: Viviste la época dorada de los turismos en España. Quizás uno de los campeonatos más interesantes e importantes que ha habido en nuestro país. ¿Qué mató a aquel campeonato?
A.A: Es una pena que se haya perdido un campeonato como el de los turismos. Yo creo que murió de éxito. Teníamos un campeonato muy bonito y muy bien asentado pero lo que pasa es que empezaron a desarrollarse coches con una tecnología muy avanzada y esto comenzó a generar una serie de gastos que suponía que una temporada de turismos costase mucho dinero. Además la repercusión de las marcas no era suficiente porque a pesar de ser carreras televisadas, no podían sobreponerse al tirón de estar pagando esos presupuestos durante años.
Llegó un momento en el que tuvimos tres marcas en el campeonato pero que tras dos, tres años, acabaron marchándose. No podían estar soportando todos los años el hacer esa inversión. Ahí es donde se murió el campeonato. Si hubiéramos seguido con unos costes más rebajados, coches menos sofisticados…y eso no quiere decir que fuesen menos espectaculares y hubiésemos tenido parrillas con más coches a lo mejor el campeonato hubiera podido mantenerse. Fue así y fue una pena que se muriera y que no se haya podido retomar un campeonato de turismos en condiciones en nuestro país.
Es una pena que se haya perdido un campeonato como el de los turismos
MPF1: FIAT Tipo, Opel Vectra, BMW M3, BMW 318 S. Aquellos coches del malogrado CET. ¿Qué significaron aquellos turismos en tu madurez como piloto?
A.A: No solamente fueron los coches. También los equipos, la profesionalidad de los equipos, de los patrocinadores, de los pilotos. Ese campeonato me consolidó como piloto y como piloto profesional que es lo que yo estaba buscando y fue una pena que se acabara porque yo y otros muchos pilotos hubiésemos tenido una continuidad y haber estado varios años en la brecha.
MPF1: De los turismos a los gigantes del asfalto. La eterna pregunta. ¿Qué te hizo pasar al mundo de las Carreras de Camiones?
A.A: Ese salto me lo hizo dar el que tenía que seguir buscándome la vida. Quería seguir viviendo de este deporte y tras la desaparición del campeonato de turismos no había ningún otro campeonato aquí en España del que pudiera vivir razonablemente y tuve la suerte de que CEPSA estaba buscando un piloto. Contactó con varios pilotos además de conmigo y tras unos tests llevamos juntos desde el año 97. Buscándome la vida y ganando.
MPF1: Cambiaste un coche de 1.000 kilogramos y 300 CV por un camión de más de 5 toneladas y 1.000 CV. ¿Qué se siente?
A.A: La verdad es que me dejó impresionado las prestaciones del camión. Yo los había visto en el Jarama pero me impresionaron las prestaciones: la aceleración, la frenada. Lo único que era muy complicado el hacerte las medidas y el puesto de conducción. Al principio no conseguía coger los vértices de las curvas y los perdía todos ya que estaba acostumbrado a los monoplazas y los turismos. Fue lo que más me costó.
MPF1: En el Europeo de Camiones también tuviste la oportunidad de vivir su momento más álgido con los Supercamiones. ¿Tienen algo que ver aquellos MAN, Buggyra o Freightliner que tuviste la oportunidad de pilotar con los actuales camiones?
A.A: Cuando yo comencé existían los Camiones y los Supercamiones. Estos últimos eran prototipos de 4.800 kilogramos, reparto de pesos 50/50, chasis de prototipo, motores de 1.500 CV, cambios secuenciales…Eran unos aparatos construidos para correr. Los Camiones eran más pesados, cambios manuales, chasis de serie… que es un poco la filosofía que tenemos ahora. De allí aquí hemos ido mejorando. Ha habido cambios en el reglamento que han permitido ir mejorando hasta llegar a los camiones de hoy en día.
Los Supercamiones eran prototipos de 4.800 kilogramos, reparto de pesos 50/50, chasis de prototipo, motores de 1.500 CV, cambios secuenciales
MPF1: De los Supercamiones a los Camiones. Una categoría más racional y en la que desde el principio comenzaste a lograr tus primeros éxitos en la categoría. Desde entonces, tres títulos y cuatro subcampeonatos. ¿Falta algo?
A.A: Seguir ganando (riéndose). Yo creo que de estos años atrás a ahora nos hemos consolidado como uno de los mejores equipos del campeonato y cada temporada tanto para el equipo Cepsa como para mí salimos a ganar. Obviamente no siempre se puede porque no sólo somos nosotros los que salimos a ganar sino que son muchos más los que tienen el material y el presupuesto para hacerlo. Estos últimos años Buggyra ha habido una época en la que ha estado fuerte, ahora está Hahn fuerte…hay una serie de pilotos y de equipos que nos vamos rotando pero nosotros nos hemos consolidado como uno de los mejores porque desde 2005 no nos hemos bajado del podio, algo que no pueden decir los demás y el objetivos del equipo Cepsa y mía es salir a ganar.
MPF1: 2007 y 2009 significaron dos momentos tristes para ti. En ambos y en tu casa, el Jarama, perdiste el campeonato, primero con en los despachos y después con una maniobra anti-deportiva. ¿Han sido los peores momentos de tu trayectoria como piloto?
A.A: La verdad es que el título de 2007 con aquel fallo y aquella sanción…nosotros en los papeles ganamos el título e incluso ganamos la apelación pero Buggyra recurrió al tribunal de apelación de la FIA con tan mala suerte de que parece ser que ese año la FIA debía algún favor a la federación checa y fallarn a su favor sin ninguna razón. Son cosas que pasan, mala suerte y sí que te vienes un poco abajo porque que te quiten una títulos por unas causa así pues te duele mucho.
MPF1: Tras luchar con los Freightliner a brazo partido (algo casi literal), ahora el enemigo ha cambiado y se llama: Jochen Hahn. Tras dos años de ver su trasera, este año es el turno de verle desde el retrovisor. ¿Es tu rival más duro desde que estás en los camiones?
A.A: Podría decirse que sí. Es un rival muy duro que ha conseguido consolidar un buen equipo, con buen presupuesto y hacer las cosas bien. Tiene buen material y él está haciendo las cosas bien. Estamos los dos a una altura muy similar. Yo pensaba que íbamos a tener más competencia por parte de Norbert Kiss y Markus Östreich pero lo que pasa es que aun siendo rápidos no han sido regulares y se han ido descartando poco a poco de cara al título. Al final nos volvemos a ver las cara Jochen y yo. Los Renault pensábamos que iban a dar un paso al frente pero se han estancado e incluso parecen haber dado un paso atrás.
Yo pensaba que íbamos a tener más competencia por parte de Norbert Kiss y Markus Östreich pero lo que pasa es que aun siendo rápidos no han sido regulares y se han ido descartando poco a poco de cara al título
MPF1: ¿Es 2013 el año definitivo para tu cuarto título?
A.A: Ojala. Estamos en una buena posición. 21 puntos con todos los puntos que faltan no son definitivos pero estamos mejor que el año pasado. Si todo va bien, esperamos salir de aquí con algo más de ventaja y eso daría tranquilidad de cara a Le Mans. 25 puntos serían una buena diferencia para la última cita ya que a Le Mans me gusta llegar con holgura.
MPF1: No hace falta más que mirar las gradas, al menos en el Circuito del Jarama, están llenas a reventar para ver éxito de las carreras de camiones. Tienen la espectacularidad que tanto demandan los aficionados, pero a pesar de ellos son una de esas categorías desconocidas. ¿Qué hace falta para que la gente se enganche a los camiones?
A.A: El público está enganchado, pero echamos de menos a más marcas. Más rivalidad. Que puedas tener más marcas más allá de los dos MAN que están ganando. Contaríamos con un paddock más vistoso con más gente... Echo de menos al menos un par de marcas más.
MPF1: Podríamos decir que el Jarama es el jardín de tu casa y tu circuito preferido. ¿Qué tiene el trazado madrileño que no tengan los demás?
A.A: Principalmente el público. El Jarama es un circuito muy particular con el Supersiete en el que la gente está muy cerca de la pista. Algo que no es habitual en el resto de circuitos y el ambiente es espectacular. El público se vuelca contigo y puedes oírles gritar.
MPF1: 30 años en el mundo del automovilismo de competición. ¿Echas la mirada atrás y que ves? ¿Te ha faltado algo en tu carrera deportiva?
A.A: Sí, haber sido campeón del mundo de Fórmula 1. Mi carrera deportiva iba dirigida a eso y era muy complicado y muy difícil así que si tengo que decir algo, echaría de menos eso.
Por último, sólo nos queda agradecer a Antonio Albacete y al departamento de prensa del CEPSA Truck Team la oportunidad y su tiempo.