Todo en orden. Fueran por quien fueran las insinuaciones de Flavio Briatore sobre el no respeto a la norma de congelación de motores por parte de algunas escuderías, parece que la FIA ha eliminado de la lista de posibles destinatarios del mensajito a la escudería británica McLaren, de la que se quedó el motor utilizado por Lewis Hamilton en Hockenheim para revisar rutinariamente que todo estuviera en orden.
De este modo, el primer propulsor que la FIA ha comprobado que cumpliera la normativa de congelación del desarrollo, el Mercedes-Benz que empuja a los McLaren MP4-23, ha pasado sin problemas las pruebas, consistentes en evaluar al detalle las diversas partes del motor y compararlas con la unidad que Mercedes envió a principios de año.
Como los examenes aleatorios seguirán sucediéndose, veremos si sale algo raro en una de estas, o Briatore sólo se quejó por pálpitos.
Vía | Autosport