Después de que las mejoras llevadas para el Gran Premio de España fueran claramente útiles y elevaran el rendimiento de Sauber, en el equipo suizo son optimistas de cara al Gran Premio de Mónaco, donde creen que seguiran con la actual curva ascendiente. En particular, uno de los puntos que creen que pueden beneficiarles es el uso de los dos compuestos más blandos de toda la gama, el superblando de color rojo y el blando, de color amarillo.
Nico Hülkenberg en particular es quien apuesta por esta teoría, a la vez que explica que el desafío que supone Montecarlo siempre es fantástico por lo difícil de la pista, por los pocos errores que se pueden cometer y por el entorno en el que se desarrolla el fin de semana. Esteban Gutiérrez, por su parte, explica que Mónaco fue siempre uno de sus circuitos preferidos en su época de la GP2 y espera poder conseguir sus primeros puntos allí.
Nos da una de las posibles claves de la carrera; cómo no, la gestión de neumáticos. Aunque en el pasado no ha sido necesariamente un elemento crucial y por la poca degradación, los neumáticos más blandos siempre tenían una duración más que aceptable, lo cierto es que este año podría ser importante. El segundo piloto de Sauber es consciente de ello y espera una carrera complicada en este sentido. Habrá que ver si se equivoca o si acierta de lleno.
El equipo Sauber traerá más mejoras aún, además de las piezas específicas de alta carga aerodinámica que corresponden a esta peculiar carrera. Se centran en darles el máximo agarre a los pilotos, además de darles confianza para que puedan rodar cerca de las barreras sin miedo a golpearlas. La clave está en confiar en el coche, y por ello los mejores coches suelen ir mejor aquí, aunque un piloto valiente también puede suplir "fácilmente" las carencias de un monoplaza no tan bueno. ¿Lo hará alguien en Sauber?
Vía | Motorsport.com