El pasado fin de semana tuvimos la oportunidad de seguir en directo el Mundial de Turismos en el Circuito de Boavista en Oporto. Antes de decir cualquier otra cosa, tengo que reconocer que el paddock que vi es el más heterogéneo que he visto en los últimos años. Es muy raro ver ver compartir espacio a impresionantes GT o los turismos del WTCC con los Super Seven by KIA, pequeños monoplazas, clásicos, barquetas los Abarth 500 o copas monomarca lusas como los FIAT Punto o los Alfa Romeo 156. E incluso pudimos ver reliquias de competición como FIAT Uno o Citroën AX...Y seguro que me dejo alguna rareza.
Es por ello que hoy os recomiendo encarecidamente que os deis una vuelta por la galería. No es porque lo diga yo, es porque merece la pena. El recuerdo de Michel Nykjaer a Allan Simonsen, monoplazas propulsados por Campofrío, un Rolls-Royce utilizado de coche de servicio, un Mercedes-Benz SLS AMG GT3 cuya puerta es fijada en plena carrera con la manida cinta americana, los Punto con más carrocería abollada que sana, un piloto con un nombre que es castellano resulta curiosos...e incluso una piscina que algún equipo utilizó para apaciguar el calor reinante. Muchos detalles y muy curiosos.
Fotos | Igor Zamorano