En los últimos años, no ha sido habitual ver a los Corvette "pata negra" en manos de otros equipos que no fuesen el equipo oficial de la marca. Eso podría cambiar en el futuro ya que desde Covette Racing han confirmado que están en conversaciones para vender su nuevo C7.R a equipos privados siendo Larbre Competition el primer interesado. Es más, por el momento, el equipo francés es el único interesado en el modelo norteamericano.
El problema para los equipos es que de hacerse con un C7.R, la actual reglamentación les obligaría a participar dentro de la categoría LMGTE Pro, reservada para coches de última generación. El director de Larbre Competition, Jack Leconte, ha informado que la decisión final de hacerse con uno de los nuevos C7.R depende del ACO ya que se está intentando conseguir que este modelo pueda participar dentro de la clase LMGTE Am, reservada a aquellos modelos con al menos un año de antigüedad. Si finalmente Larbre confirma su programa, podría disponer de un C7.R de forma inmediata como así lo han reconocido desde Corvette Racing.
Vía | Sportscar 365