Muchas veces se reconocen más los meritos del piloto que los del copiloto, pero en muchas ocasiones corren mas peligro que los de su izquierda. Seguir el ritmo que te implica el recorrido, llevar todos los controles horarios en orden e incluso ser el primer mecánico que repare el coche. Pero esta última en muchas ocasiones conlleva un riesgo.
Ya lo pudimos ver en Jordania donde el copiloto de Latvala casi fue aplastado por el Ford Focus del finlandés. En este caso podemos ver un documento antiguo en el que un piloto tras sufrir una salida de pista producida posiblemente por un reventón del neumático, se escucha el sonido de la llanta contra el asfalto, y recibir la ayuda de los espectadores el piloto le pide a su compañero que se situé en el lateral del capó para que haga contrapeso... y el resto es digno de verlo.
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