La hija de Sir Frank Williams considera que la escudería fundada por su padre en 1977 sobrevivió a un período de grave crisis, así que ahora espera reencontrarse con el protagonismo en la Fórmula 1. La escuadra de Grove, de las mejores en las décadas de los 80 y 90, es una de las históricas que aún permanece en actividad y además se mantiene fiel a la romántica escuela de los garajistas.
Para hallar los últimos títulos de Williams hay que remontarse hasta el año de 1997, cuando el canadiense Jacques Villeneuve logró la corona, séptima de pilotos y además contribuyó para que el equipo consiguiera su novena de constructores. Pero después hilvanaron nefastas temporadas, donde observaron a numerosas escuderías tradicionales venirse a menos hasta desaparecer, como el caso de Tyrrell, situación que muchos entendidos también pronosticaron para Williams.
En declaraciones para The Independent, la directora adjunta del equipo, declaró:
Sería muy malo para la Fórmula 1 que el legado de Williams desapareciera. Hay historias de crisis similares a las que padecimos pero con un pésimo final, nuestra historia jamás terminará como la del equipo Tyrrell. ¿Vender? ¿Desaparecer? Por encima de mi cadáver, por supuesto que nada de eso va a suceder. Mi sueño es ganar el mundial con esta escudería. Yo crecí en la Fórmula 1, un ambiente lleno de hombres, así que me acostumbré rápido al entorno y no me siento intimidada dirigiendo al equipo... Cuando me hice cargo de esta función, nunca pensé en que soy una mujer y me será difícil, nada de eso, precisamente lo vi como un desafío para mí por el hecho de que soy mujer.
Vía | speedweek