Disfrutar de las carreras por televisión, vivir los rallyes a pie de tramo, recorrer medio mundo para ver un gran premio. El nivel de "compromiso" de los aficionados al mundo del motor puede llegar a ser elevado, pero hay veces que esa afición llega a límites insospechados. No es la primera vez que vemos a alguien fabricarse su propio monoplaza pero la historia de Miso Kuzmanovic se merece su propio hueco en Bricopasión.
Tras 200 horas de trabajo y 25.000 euros de inversión, este serbio ha cumplido el sueño de tener su propia "replica" de un Fórmula 1. Kuzmanovic ha tardado dos años, a base de horas durante los fines de semana, en dar vida a este particular monoplaza (aunque sea biplaza, de ahí sus 6 metros de longitud) y todo ello para poder salir a dar una vuelta con sus amigos moteros ya que una de las principales características de este vehículo es que es legal para conducirlo por carreteras y así lo hace habitualmente en su localidad, Prnjavor.
Para que conducir sea más placentero, el monoplaza de Miso Kuzmanovic tiene equipo de música o si os preguntáis sus prestaciones, bajo el "capot" hay un motor de origen Mercedes-Benz de dos litros que le permite alcanzar los 190 km/h (esperemos que no se le ocurra hacer un Top Speed con esto). Una curiosa elección viendo con que colores ha decidido decorar su monoplaza. Podría ser la primera vez que un "Ferrari" (aunque sea demasiado decir) utiliza uno de estos motores alemanes. Tal y como sucederá con Williams en 2014.
Vía | El Mundo Deportivo