Veintitrés años entre ambos. BMW regresaba la temporada pasada al DTM con el objetivo principal de recuperar el título que consiguieron por última vez en el año 1989. Roberto Ravaglia consiguió en aquella ocasión la victoria a los mandos del BMW M3 E30. En 2012, Bruno Spengler le sucedía, esta vez con el nuevo M3 E92. Dos modelos y dos pilotos completamente distintos.
Para celebrar estos dos últimos, la marca de las aspas no ha dudado en poner sobre la pista de Hockenheim a estas joyas de cuatro ruedas. En esta ocasión, Spengler y Ravaglia se intercambiaban las monturas y los M3 pasaban a tener los colores que lucieron ambos pilotos en los años que ganaron el DTM. Obviamente la diferencia entre ambos coches era mucha y siempre es curioso ver lo que opinan ambos pilotos sobre las sensaciones que tienen al conducirlos.
Recordemos que este mismo fin de semana dará comienzo una nueva temporada del campeonato alemán de turismos y afortunadamente para todos nosotros, lo podremos seguir a través del propio canal de Youtube y en las televisiones españolas para aquellos afortunados poseedores de Canal+ o Esport3.