Se confirmó la traición. El pasado lunes Martin Tomczyk anunciaba que abandonaba Audi tras 11 años. Hoy, Jens Marquardt ha confirmado que en 2012, Tomczyk será piloto de BMW en el DTM. Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío y parece que tras el título, el alemán ha sabido vengarse de Wolfgang Ulrrich y de la decisión que tomó el año pasado al relegarle a un equipo satélite y a un coche teóricamente inferior.
Además de mejorar la plantilla de un rival, Tomczyk además se lleva el número 1 a BMW, marca que regresará al campeonato el año que viene tras 20 años de ausencia. Y si el nuevo BMW M3 funciona, por talento al volante no va a ser.
De momento BMW ha confirmado a cuatro pilotos para 2012: dos "suyos" (Andy Priaulx y Augusto Farfus), uno robado a Mercedes-Benz (Bruno Spengler) y otro robado a Audi, Martín Tomczyk. Parece que en Munich se están tomando las cosas muy en serio y no les importa comenzar la guerra incluso antes de debutar en la pista. Sea como fuere, desde ya, a BMW la vamos que tomar muy en serio a pesar de su "falta" de experiencia.