Queda bien poco para vivir la primera carrera nocturna de la historia de la Fórmula 1, y hoy por hoy, lo que más asusta a pilotos y escuderías es la posibilidad que el próximo fin de semana se dé la temida combinación de la lluvia con la iluminación artificial, que podría causar serios problemas para los pilotos a la hora de surcar las calles de Singapur.
Los dos pilotos de BMW Sauber, Robert Kubica y Nick Heidfeld, ya han declarado sus dudas y temores acerca de lo que podría suponer la aparición de la lluvia en Singapur, mientras que Martin Whitmarsh ha sido bastante más esclarecedor en sus explicaciones: "Esperamos que la temperatura ambiente esté alrededor de los 30 grados, la temperatura de la pista se enfriará por la noche, pero aún así estará cercana a los 40 grados, a menos que llueva. Si llueve, no está claro si habrá un problema con el resplandor y el brillo de las luces por culpa de las gotas de lluvia, que los hacen mayores de lo habitual". Para ello, McLaren llevará visores especiales para evitar que se acumulen gotas en los mismos.
En fin, que esperemos que este primer Gran Premio nocturno se salde sin malas experiencias originadas por la lluvia.