Hace diez días la temporada de las Blancpain Endurance Series daba comienzo y lo hacía de la mejor forma, con una carrera en el siempre magnifico Circuito de Monza. La parrilla con 44 inscritos nos hacia rememorar las grandes épocas de las carreras de GT’s, pero lo que es bueno para unos (en este caso los aficionados) es malo para otros. Los problemas sufridos durante la clasificación hundieron al Nissan GT-R Nismo GT3 número 80 de Nick McMillen, Florian Strauss y Alex Buncombe.
Precisamente era Buncombe al que le tocaba “bailar con la más fea” saliendo en la parte de atrás del pelotón (posición de parrilla 32) y obligado a remontar con uno de los coches que sin duda se está mostrando más eficientes dentro de los GT3. Si el año pasado nos dejaba todo un festival de adelantamientos en Donington Park, ahora es el turno de que Al haga 18 adelantamientos en dos vueltas propiciados en parte a una gran salida y las grandes frenadas del Circuito de Monza. Del 32 al 13, posición en la que finalizarían la carrera. Un espectáculo.