Los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Australia han dado inicio, un año más, a una nueva temporada de Fórmula 1. Tras tres largos meses de trabajo y una cortísima pretemporada, pilotos y equipos han vuelto a pista para demostrar qué nos tienen que ofrecer en este 2018.
Los vigentes Campeones del Mundo han dominado una sesión, en la que no olvidemos, seguimos sin saber en qué condiciones se han marcado los tiempos. Los que sí que han empezado la temporada igual que la terminaron, ha sido McLaren. Fernando Alonso ha vuelto a tener problemas en su coche que le han impedido completar el plan de trabajo previsto para la primera parte de la jornada.
Nada más ponerse los semáforos del pitlane de Albert Park en verde, los pilotos se han apresurado a saltar a pista para hacer la primera vuelta de instalación del año, y una de las más importantes. Sebastian Vettel ha sido el primero en salir con su nuevo Ferrari SF71-H, con el que tendrá que disputarle las primeras posiciones a Mercedes.
Tras el revuelo inicial, la calma. Al igual que en los últimos años y de que los pilotos tienen un juego de neumático extra para los primeros treinta minutos, los equipos siguen tomándoselo con mucha calma. De hecho, el único box donde la acción no ha parado, ha sido en McLaren.
Tras el primer par vuelta de Fernando Alonso han vuelto a saltar todas las alarmas en el equipo de Woking. Después de lo visto en pretemporada tampoco podíamos esperar un Gran Premio de Australia sin problemas, pero los problemas han vuelto demasiado pronto al MCL-33 del asturiano.
Desde el equipo han alegado problemas en el escape tras unos primeros minutos con caras de preocupación de los mecánicos del equipo McLaren. Tras más de una hora de trabajo en su coche, Fernando Aloso podía volver a salir a pista a falta de veinte minutos para el final de la sesión y siendo el único piloto sin marcar tiempo.
Aunque para la 19º posición lograda por su compañero de equipo Stoffel Vandoorne hasta el momento, según parece también con problemas con refrigeración, tampoco se había perdido demasiado.
El piloto de Toro Rosso Pierre Gasly ha tenido el honor de ser el primer piloto en ser sancionado en esta temporada 2018. ¡Y no ha tardado mucho! Ha sido una sanción económica por superar la velocidad permitida en el pitlane.
Al final de la primera sesión de entrenamientos libres Lewis Hamilton ha sido el hombre más veloz sobre la pista con un tiempo de 1:24.026, seguido a medio segundo por su compañero de equipo Valtteri Bottas.
A los Ferrari, se les ha colado por delante un Max Verstappen que promete volver a dar guerra. Kimi Raikkonen, en la cuarta posición, se ha mostrado más cómodo en el Ferrari que Sebastian Vettel, que según han confesado desde el equipo, aún tienen algunos detalles que ajustar antes de que empiece el Gran Premio.
Fernando Alonso finalmente, en los veinte minutos que ha tenido para marcar un tiempo, ha conseguido escalar hasta la octava posición, con un registro de 1:25.896, a casi dos segundos del Campeón del Mundo.
Justo por detrás, ha terminado Carlos Sainz tras una gran sesión junto al equipo Renault. El madrileño tienen por delante una gran temporada en la que su compañero de equipo será su principal rival. Por el momento, con la 13º posición de Nico Hülkenberg, le ha superado en este primer asalto.
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