Buenas noticias, o malas, para los amantes a la resistencia. En la jornada de ayer se confirmaba que a partir de 2014, las American Le Mans Series y las Grand-Am Series se fusionarán creando una única competición. Mala noticia porque perdemos una de ellas. Buena noticia porque de su unión nacerá una competición mucho más fuerte y que tendría que dar lugar a una parrilla bien poblada. Es más, la bajada en el número de inscritos en ambas competiciones ha tenido buena parte de culpa en el nuevo acuerdo.
Por el momento no sabemos ni el nombre del campeonato ni los tipos de vehículos que participarán en en las nuevas series aunque si se ha dejado entrever que los actuales Daytona Prototype (quieren que algo 100% Made in USA acapare los titulares) serán la categoría superior. Desde la organización van a tratar de buscar la manera para que los LMP2 puedan estar presentes mientras que los únicos asegurados son los GTE que confirmaron que tendrán hueco en la parrilla. El campeonato contará con un calendario de 12 pruebas siendo las 12 horas de Sebring su cita más importante. Al menos por el momento.
La nueva fusión ha sido recibida con agrado por el ACO y junto a ellos van a tratar de conseguir que los primeros clasificados de cada categoría obtengan una invitación a las 24 horas de Le Mans. En 2013, ALMS y Grand-Am Series mantendrán su formato actual, cada una por su lado.