La superioridad de los Red Bull, al menos el de Sebastian Vettel, en este comienzo de temporada, sólo se ha visto salpicada por dos incidencias muy concretas y que han impedido que el dominio sea total y apabullante. Aún así, y a pesar de que hay dos Ferrari al frente de la clasificación, este dominio no ha pasado desapercibido para nadie.
Tanto que ya han comenzado los rumores sobre el porque de tanta superioridad. Y eso que en la tabla, dos Ferrari son quienes dominan. En el paddock se dice que el secreto del Red Bull RB6 está en su suspensión. Aunque nadie sabe a ciencia cierta cómo funciona, la historia más extendida dice que Red Bull aprovecha un resquicio en el reglamento que permite drenar o añadir gases comprimidos a los coches para inyectar gas en la suspensión.
De modo que el set-up de la suspensión sería más adecuado para comenzar la carrera con el monoplaza cargado de gasolina. Algo más sencillo que una suspensión activa pero lo suficiente como para que el dominio en la calificación sea el que hemos visto hasta ahora.
La FIA analizó el RB6 durante el pasado Gran Premio de Malasia y no encontró nada raro. Aún así no quiere oir ni hablar de sistemas que controlen la altura. Es por ello que en la jornada de ayer hizo llegar una circular a todos los equipos en el que advertía que ningún tipo de cambio en la suspensión será permitido durante la estancia de los coches en el parque cerrado. En Red Bull están muy tranquilo, lo que nos hace pensar que su sistema es distinto al que la gente cree.
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