No lo está haciendo nada mal Kimi Raikkonen en su temporada de debut en el Mundial de Rallyes. Además, desde que llegó a los tramos, ha clamado a los cuatro vientos que el ambiente de los rallyes es mucho más sano que el del Fórmula 1. Aún así, casi todos esperamos que el finés vuelva al lugar de dónde vino. Quizás por ello, su nombre aparece relacionado, una y otra vez, con algunas de las mejores escuderías del mundial.
Su nombre, sonó, y de manera bastante fuerte, para heredar el asiento de Mark Webber en Red Bull. Que la marca del toro rojo patrocine su incursión en los rallyes decía bastante. Pero no. El australiano fue confirmado para la próxima temporada. Se cerraba una puerta. Quedan más oportunidades. Ahora el nombre de Kimi Raikkonen se une al de Renault. La escudería francesa ya no es la cenicienta de los últimos años. Sus coches pueden luchar por meterse en el podio, y a día de hoy, lo único que les falta es completar su pareja de pilotos con un segundo top-driver. Robert Kubica lo es. Vitaly Petrov está muy lejos de serlo.
Renault, y Genii Capital, ya tienen los patrocinadores que inyecten dinero para el desarrollo del monoplaza, ahora, si quieren luchar por cotas más altas les toca invertir en fuerza humana. Su equipo técnico está fuera de toda duda y tan sólo chirría por el lado del piloto ruso. Un pasito más para que las cuatro grandes escuderías se conviertan en cinco y estemos ante uno de las épocas doradas de este deporte con hasta 10 pilotos pudiendo luchar por el podio.
Vía | TheF1.com