El sábado, además del dolor físico, Lewis Hamilton parecía estar contra el mundo. Si ya en Silverstone el británico no entendió las distintas estrategias de paradas en boxes con su compañero de equipo, el accidente durante la clasificación encendió más los ánimos del Campeón del Mundo de 2008. A pesar de que el contrato con Mercedes AMG lo une a los alemanes hasta 2015, el clima de tensión que se está viviendo con Nico Rosberg en la lucha por el Mundial puede hacer que la pólvora comience a arder.
La renovación a Nico Rosberg por dos temporadas más, ha colocado al alemán como “primer plato” de la escudería de la estrella, mientras que es ahora cuando las conversaciones para prorrogar el acuerdo con Hamilton han empezado. Desde Gran Bretaña llegan rumores de que la oferta estaría en torno a los 85 millones de euros por un contrato de tres temporadas en formato 2+1, o lo que es lo mismo, dos años con opción a una más.
Por su parte, Hamilton ha tenido que recurrir a un programa de fisioterapia para recuperarse del fuerte impacto sufrido en Hockenheim después de que el disco delantero derecho de su W05 fallara y el piloto de Mercedes acabase violentamente contra las protecciones. A pesar de que en un primer momento se le vio cojear, el principal problema se ha localizado en la espalda y el cuello de Lewis. Veremos si no le penaliza este fin de semana en Hungaroring.
Vía | Omnicorse