Las furgonetas camper arrasan en todo el mundo, pero disfrutar de esta afición se vive de forma diferente en función del lugar. Mientras que en Europa ganan fuerza las camper “de bolsillo”, como las Mercedes Clase T y Citroën Berlingo camperizadas, al otro lado del charco hacen las cosas a lo grande.
La nueva Ford Transit Trail es un buen ejemplo de ello. La marca del óvalo la ofrece de serie con todo lo necesario para llegar hasta cualquier parte, incluido un motor V6 EcoBoost gasolina de 314 CV y una preparación todoterreno que deja en ridículo a cualquier SUV.
Músculo americano
Lo bueno de las camper es que permiten viajar con la casa a cuestas, pero no todas brindan la posibilidad de llegar a cualquier sitio. Más allá de las normativas para estacionar de cada zona, el terreno suele marcar las limitaciones, puesto que la mayoría de camper no pueden salir del asfalto o de un camino.
Existen preparadores que convierten una camper en un auténtico todoterreno, incluso algunas marcas ofrecen modelos 4x4. Es el caso de MAN con la TGE desarrollada junto a Noranzt, pero su precio es muy elevado y apenas existen alternativas de este tipo a la venta en Europa.
En cambio, en Estados Unidos es diferente. Allí se puede comprar la Ford Transit Custom desde 65.975 dólares, el equivalente al cambio actual a 66.450 euros, es decir, menos de lo que cuesta en España una Volkswagen California Beach Camper 2.0 TDI 4Motion con 150 CV y tracción total (74.415 euros).
La furgoneta americana utiliza como base la misma Ford Transit que se comercializa en Europa, pero debajo de su capó se esconde un motor EcoBoost V6 gasolina biturbo de 3.5 litros que desarrolla 314 CV y un par máximo de 542 Nm.
Este bloque, que es más potente que el V6 3.0 EcoBoost de 288 CV del nuevo Ford Ranger Raptor, se asocia a una transmisión automática de 10 relaciones y a un sistema de tracción total.
Esto último, unico a la suspensión elevada, los neumáticos todoterreno de 30 pulgadas y las protecciones inferiores de la carrocería, hace que esta camper no tenga nada que envidiar a un todoterreno.
En lo que respecta al diseño, se parece mucho a la Ford Transit Trail europea, pero tiene un aspecto más salvaje gracias a los pasos de rueda y vías ensanchados, la parrilla sin las letras de Ford o la rueda de repuesto alojada tras el portón trasero.
Aunque lo que marca la diferencia es el propulsor EcoBoost, puesto que nuestra Transit Trail se conforma con motores más pequeños, como el 2.0 EcoBlue diésel de 130 CV.
Ford Pro fabrica la Transit Trail americana en la planta de Missouri y la ofrece con varios tamaños de carrocería, distancia entre ejes normal o batalla alargada.
Sea cual sea la opción escogida, el interior viene preparado para instalar los elementos necesarios para convertirla en camper, como las camas o los muebles. También incorpora de serie asientos delanteros giratorios, un panel de fusibles auxiliar, varios puertos de carga, cableado para alimentar electrodomésticos y, opcionalmente, un ventilador en el techo.