Hace algunas semanas conocimos de primera mano al Ford Puma ST. Ya os hemos contado todo lo que sabemos hasta la fecha de uno de los pocos B-SUV deportivos del mercado, y ahora la marca del óvalo nos ha dejado caer otro detalle más a tener en cuenta, y uno muy importante: el precio.
El nuevo Ford Puma ST arranca con un precio de tarifa de 34.000 euros justos, sin extras. Estamos por lo tanto ante el tope de gama de la gama Puma, pero con una diferencia considerable con respecto al resto de variantes.
El Ford Puma ST es el felino más fiero de la gama
Hasta ahora sabíamos que el Ford Puma se situaba en precios entre los 22.505 euros del Ford Puma 1.0 EcoBoost MHEV de 125 CV con cambio manual en acabado Titanium con cambio manual y ascendía progresivamente hasta situarse en los 28.825 euros del Puma 1.0 EcoBoost de 125 CV con cambio automático y acabado Vignale. La motorización diésel más cara era la 1.5 EcoBlue de 120 CV con cambio manual (no hay diésel automático ni en opción) y acabado ST-Line X con un precio de 26.045 euros.
Por lo tanto el Ford Puma ST se posiciona muy por encima del resto de sus compañeros de gama con 5.175 euros por encima de la motorización de gasolina y casi 8.000 euros más que el diésel más caro. Obviamente esta diferencia de precio tiene un por qué, y no es más que la mano de Ford Performance.
El nuevo Puma ST no es sólo un Puma con aditamentos aerodinámicos o más equipamiento, es un coche con una puesta a punto específica y el motor más prestacional de toda la gama. El propulsor se ha tomado directamente del Ford Fiesta ST, siendo un 1.5 turbo de gasolina con tres cilindros, 200 CV y 320 Nm de par motor.
Por fuera podremos reconocer al Ford Puma ST porque es un coche más agresivo, sobre todo si es pintado en el Verde Mean que Ford ha escogido como color exclusivo para la variante más radical. Los paragolpes están más marcados, el delantero genera un 80% más de carga aerodinámica gracias al splitter inferior y destaca la doble salida de escape en la zaga.
Otros cambios exteriores son los elementos en negro como el techo, los retrovisores, los marcos de las ventanillas, el alerón o la parrilla delantera que, además, tiene un entramado más amplio para dejar pasar más aire hacia el motor. Los pasos de rueda se han ensanchado y calza llantas de 19 pulgadas con frenos sobredimensionados en su interior.
El chasis se ha puesto a punto y el programa de desarrollo de Ford Performance ha llevado a incluir soportes del motor específicos, barras estabilizadoras y de torsión más rígidas, suspensiones más duras y una dirección más directa. Lo mejor es que también incluye por primera vez en un coche de su segmento un diferencial delantero de deslizamiento limitado LSD que trabaja junto al control vectorial de par para mejorar la tracción en curva.
Entre tanto, en el interior también hay cambios notables como los nuevos asientos deportivos de Recaro, volante achatado, un pomo de cambio específico y nuevas inserciones que simulan fibra de carbono.
El cuadro de mandos es digital de serie y encierra cuatro modos de conducción (Normal, Sport, Track y Eco), además de permitir la actuación del control de estabilidad en tres niveles diferentes pudiendo desactivarse por completo.
Las primeras unidades del Ford Puma ST deberían llegar al mercado a principios de 2021 y nos morimos de ganas por ponernos a sus mandos para contaros qué tal va. Al menos sobre el papel promete a cambio de esos 34.000 euros.
Dentro de ese precio no están incluidos algunos elementos que se limitan a ser opcionales, como la apertura sin manos del maletero o las ayudas a la conducción avanzadas como el control de crucero activo o la frenada automática.
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