Si tuvieras un Shelby Mustang GT350 clásico seguro que te gustaría poder llevarlo a eventos, lucirlo, pasearte con él. Pero para eso necesitas poder transportarlo. Allá por los 60 el sueño americano flotaba en las carreteras junto al legendario Carrol Shelby y transportar tu bólido de pista en pista era de rigor.
Así nació esta 'grúa-autocaravana' Ford F-350 'Race Car Hauler' de 1996, encargada hace cinco años por un cliente que quería poder llevar con él sus inmaculados coches de competición por todo el Reino Unido. Ahora, Silverstone Auctions la tiene a la venta por 49.544 euros.
La transformación de un F-350 de cuarta generación
No fue hasta 1946 cuando la producción de consumo se reanudó tras una cruenta guerra que paralizó cada esfera de la sociedad. En estos años, Ford consolidó la Serie-F, ya que tras la guerra, muchos estadounidenses de zonas rurales se trasladaron a centros urbanos y suburbanos en busca de trabajo, y se llevaron sus camionetas Ford con ellos.
Con la llegada de la segunda generación de la Serie-F en 1953 Ford aumentó la potencia del motor y la capacidad, y cambió la marca de la serie. El F-1 se convirtió en el F-100, mientras que los F-2 y F-3 fueron integrados en la nueva línea F-250. F-4 se convirtió en F-350.
En octubre de 1964, la cuarta generación de la Serie-F debutó con un nuevo chasis que permaneció sin cambios hasta 1979, y es precisamente esta generación la que fue transformada hace en esta camioneta/remolque a raíz de un encargo. Fue creada por un experto carrocero hace cinco años con las instrucciones de que debía ser práctico y poder además transportar con estilo los deportivos del cliente británico.
El motor es un Ford 5.8 con inyección de combustible de 1996 que funciona con una ECU moderna y se acopla a una caja de cambios automática. Cuenta también con frenos de disco delanteros y control de crucero. En la cabina del conductor nos encontramos, ojo a esto, con tres plazas plegables que dan paso a una cocina típica de 'diner' de carretera americano y una zona elevada de literas para poder pernoctar cerca de un circuito.
Puede que el precio no sea lo más atractivo, pero este Ford irradia nostalgia y tampoco es difícil imaginarse un Shelby Cobra viajando a lomos de esta creación junto a un Ford LN 8000.
Foto | Silverstone Auctions