En estas páginas hablamos muy habitualmente de coches híbridos, pero también de tecnología e innovación en el campo del automóvil. El futuro de la automoción parece que está claramente ligado a esta faceta de innovación, mejora constante de los procesos, eficiencia máxima a la hora de la verdad, y en eso la tecnología desarrollada por Toyota en todos sus proyectos híbridos tiene mucho que decir.
Si volvemos a reflexionar sobre los principios de la hibridación, estamos hablando de combinar dos tecnologías, la eléctrica y la de combustión más tradicional, para romper las barreras de consumo y de emisión de CO2 y contribuyendo por un lado a una mejor economía de transporte, y por otro defendiendo el medio ambiente desde la parte más tecnológica. Por eso la tecnología de motor eléctrico creada para los coches híbridos de Toyota está siendo probada por Gamesa, con la intención de aprender y sacar conclusiones que supongan avances para la implantación del coche eléctrico en España.
La colaboración entre Gamesa y Toyota España está dirigida al fomento del uso de los vehículos eléctricos en entornos urbanos, y para ello se ha cedido un Toyota Prius Plug In durante seis pmeses para evaluar varios apartados: la tecnología del coche, analizar la situación de la infraestructura de recarga disponible e identificar posibles condicionantes, y las necesidades por cubrir.
El objetivo a corto plazo es tener estudiados qué pasos dar para que el coche eléctrico sea una realidad en España. La tecnología en sí, os coches híbridos enchufables, por ejemplo, o los coches eléctricos puros no pueden, por sí solos, conquistar las ciudades. Se necesita una infraestructura determinada, un mínimo de estaciones de recarga disponibles, una potencia suficiente como para garantizar tanto recargas rápidas como recargas normales,... Solo con ambos protagonistas funcionando como un buen equipo engrasado podemos esperar que en un plazo breve no haya ningún problema en cuanto a autonomía.
Según David Mesonero, Director de Desarrollo Corporativo de Gamesa:
Estos vehículos, más eficientes y con menores emisiones de CO2, pueden y deben contribuir a corto y medio plazo a las necesidades en materia de ahorro energético y respeto al medio ambiente y a comprobar las enormes sinergias entre la energía eólica y la movilidad verde
Estaremos atentos a la evolución de esta prueba y de las conclusiones que se puedan obtener de ella. Si esto ayuda a que exista más densidad de estaciones de recarga y a que se vaya normalizando su uso, seguro que se termina por derribar esa barrera psicológica que implica a la autonomía de los coches eléctricos. Esa sería la buena noticia de verdad que nos interesa escuchar, para confirmar que sí, que el futuro es de la tecnología y la innovación tanto en los coches híbridos enchufables, como en los modelos eléctricos puros.