La Lit C1 no es la única moto eléctrica con cabina cerrada que la ingeniería ha sido capaz de idear. La Zero Tracer es otra, y si bien es también solo un prototipo, es un modelo totalmente funcional que incluso dió la vuelta al mundo entre finales de 2010 y principios de 2011, compitiendo en la Zero Emissions Race de 2011. Ya se han fabricado dos unidades.
La diferencia con la Lit C1 es que Zero Tracer no cuenta con un sistema de autoestabilización como sí tiene la Lit C1. La Zero Tracer para mantener el equilibrio a baja velocidad recurre a un tren de rodaje auxiliar que se pliega y repliega automáticamente con gran rapidez (lo podéis ver en funcionamiento en el vídeo final).
Este sistema es en verdad un par de ruedines, uno a cada lado, que hacen las veces de los que se colocan en las bicicletas de los niños para que puedan mantener el equilibrio, solo que suben y bajan solos, como si fuera el tren de aterrizaje de un avión.
Detrás de la Zero Tracer está el estudio de ingenería suizo Design Werk, y el patrocinio de la aseguradora Swiss Life. Esta moto eléctrica mide 3,65 m de largo, 1,20 m de ancho (con los ruedines estabilizadores plegados), 1,52 m de alto y 2,88 m de batalla. Pesa 640 kg en vacío.
Tiene dos plazas en tándem. El motor eléctrico es de Brusa y las baterías han sido fabricadas por Kokam. La carrocería es de Kevlar y el bastidor es tubular de acero. Las ventanillas son de plexiglass (un plástico, polimetilmetacrilato). Los faros son de xenón y los pilotos LED. El interior está realizado en fibra de carbono, cuero y aluminio.
La carrocería es muy aerodinámica, solo 0,18 de coeficiente de resistencia, y gracias a sus 184 CV (135 kW) es muy rápida, e incluso acelera más rápido que un Porsche 911 Carrera con caja de cambios PDK, pues hace el 0 a 100 km/h en solo 4,5 segundos. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h.
Al ser ligera y aerodinámica su consumo no es muy elevado, a 100 km/h unos 7 kWh/100 km. Aún así tiene unas baterías de litio manganeso de 21 kWh, pero que solo pesan 160 kg. Gracias a ellas tiene una autonomía de hasta 350 km. Si se utiliza una batería de alta densidad energética puede llegar a los 500 km de autonomía.
Sus baterías admiten recarga semi-rápida (22 kW) y en media hora se recargan al 80%. La recarga completa a 9,9 kW lleva unas dos horas, en recarga lenta llevaría unas seis o siete.
Vídeo | YouTube Más información | Zero Tracer En Motorpasión Futuro | La Lit C1 continúa con su evolución