Ayer tras llegar a casa, haber cenado y tomado mi rato de descanso, salí unos minutos con mi bolsa llena hacia los contenedores de la calle cuando coincidí con la clásica luz del camión de basura nocturno, doblando la esquina e iluminando la calle a la vez que mi cabeza con una pregunta. “¿Existe alguno de estos eléctrico?”
Me puse a pensarlo, y la verdad que para los que seguimos la evolución de la electrificación en la sociedad, no habría algo más ilógico que el hecho de que un vehículo destinado a una función ecológica, no sea ecológico en sí mismo. Así que, comencé mi rutina de investigación como editor de este blog, para traeros algo de información al respecto.
Y es que, las condiciones particulares de uso de un vehículo de servicio ciudadano como las del camión de basura, son más que compatibles con las que un vehículo eléctrico nos ofrece ahora mismo. Movilidad urbana, velocidad reducida, rutas prefijadas, paradas y arranques y actividad o trabajo por turnos.
París, la primera en electrificar sus camiones
Algunos países ya se han dado cuenta de esto, y están dando sus primeros pasos para hacer los cambios necesarios en este servicio y que sea compatible con las políticas de reducción de emisiones de CO2 en las ciudades. El objetivo sería implantar camiones eléctricos de recogida de basura.
París se va a convertir en la primera del mundo en sustituir los tradicionales camiones de basura, ruidosos y contaminantes por otros eléctricos más respetuosos. Y es que, ahora que lo pienso, seguro que algún ciudadano con sueño poco profundo agradecerá la eliminación del típico ruido a las tantas de la noche, sobre todo en verano.
En principio será una flota de 12 camiones los que entrarán en funcionamiento en la ciudad francesa. Según los estudios hechos, reemplazar un camión de basura diesel por uno con motor eléctrico obtiene como resultado una reducción de emisiones de CO2 de 130 toneladas al año por camión.
La firma VPI Electric Powertrain es la encargada de producir este vehículo de 26 toneladas, que tiene cinco series de siete paquetes de baterías de ión litio y que darán unos 250 kWh de energía. En la práctica, su autonomía permitirá recoger una carga útil de 16 toneladas de residuos en dos rondas de servicio.
Su paquete de baterías con refrigeración líquida es fabricado por la empresa Dow Kokam, que los ha diseñado de manera que sean intercambiados o recargados parcialmente en poco tiempo. Su vicepresidente Jean-Francois Herchin comenta que lograrán “usar la energía de la manera más eficiente manteniendo la potencia y aceleración necesarios para mover su enorme camión”.
Primeros cambios en España
Algunas otras ciudades disponen también de algunos camiones eléctricos de recogida de basura, aunque ahora mismo no son de gran volumen como los de París. Una es Bilbao, en cuyo Casco Viejo se ha estrenado el primer camión eléctrico de recogida, fabricado por la empresa barcelonesa Ausa.
El Modec (que puede adaptarse según la actividad vaya a realizar), es similar a los de carga y descarga de Londres, pero incorpora un compactador de basura. Tiene seis metros de longitud, 4.550 kilos de peso y una capacidad de carga de 7 metros cúbicos, aproximadamente una tonelada de basura compactada. Su velocidad es de 80 km/h y autonomía de hasta 160 km. Bajará notablemente el nivel de decibelios por la noche.
En Barcelona, con motivos de salvar la planta de fabricación en la cual está habiendo problemas laborales, puede que Iveco cierre un acuerdo para fabricar un camión de recogida de basura también eléctrico junto con la empresa Ros Roca que le suministraría el compactador de basura y que luego se ensamblaría en el vehículo.
Sin duda sería un avance que este cambio empiece a extenderse a más países y comunidades. Es importante que servicios públicos que se dan en las ciudades y usan motorización para su actividad de manera regular también se adapten a la idea de una sociedad con menos contaminación ambiental y acústica, en definitiva más limpia.
Fuente | Planeta Azul
Vía | Elcorreo, Deporgoo
Video | Youtube
Más Información | Dow Kokam, Ausa, VPI
