El mercado doméstico japonés es bastante peculiar, entre la práctica ausencia de motorizaciones diésel, la presencia de los diminutos kei cars y los modelos en exclusiva para dentro del país existen muchos coches muy interesantes que, por desgracia, no veremos en otros lugares.
Uno de esos vehículos es el Toyota Crown, una berlina de lujo que nada tiene que desmerecer a Lexus (de hecho, puede que sea incluso más lujoso que un Lexus) que sólamente se encuentra a la venta en Japón. El Crown va por la decimocuarta versión, ya que lleva a la venta desde 1955, donde la hibridación llegó para quedarse.
Toyota ofrece este Crown en dos versiones de equipamiento, Royal y Athlete, diferenciandose en el ajuste más deportivo en el Athlete. Los motores son un nuevo híbrido de 4 cilindros y 2.5 litros con ciclo Atkinson y una potencia combinada de 220 CV y un 3.5 V6 para aquellos que renuncien a las mieles de la hibridación.
Con un consumo de sólo 4,3 l/100 km este híbrido de propulsión se convierte en un modelo de lujo muy austero en lo que a consumos y emisiones se refiere, ya que tan solo emite 100 gramos de dióxido de carbono por kilómetro (según normativa japonesa, que es más suave si cabe que la europea).
El Toyota Crown se sitúa entre los vehículos más limpios del mercado, sobrepasando en un 20% los requisitos actuales y siendo hasta un 75% más limpio que lo exigido en 2005; lo que lo hace elegible para las ayudas a vehículos eficientes que el gobierno japonés tiene en marcha.
Toyota espera vender 4.000 Crowns mensuales en Japón, el único mercado en el que está presente actualmente, siendo la opción híbrida la más demandada por los consumidores. Así que ya sabéis, si queréis un híbrido japonés de lujo, o os vais a algún importador de JDM o continuáis con la opción tradicional, buscar los que se venden en Europa de la mano de Lexus o Infiniti.
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