TOSA es un prototipo de autobús eléctrico que inició su andadura por las calles de Ginebra a principios del verano. Más que por la distancia que recorre, que no supera los 1.500 metros; o el servicio sin emisiones que presta (igualmente relevante), la importancia de su existencia reside en su sistema de recarga, prácticamente sobre la marcha, una solución "intermedia" si la comparamos con el proyecto de recarga por inducción de Málaga.
TOSA aprovecha el momento de entrada y salida de pasajeros para realizar una carga de 400 kW en 15 segundos. Esta es provista a través de la propia ruta del vehículo, gracias a un sistema de paradas dotadas del pertinente cargador, lo que viene a convertir a TOSA en un trolebús sin catenarias (de ahí su nombre Trolleybus Optimisation Système Alimentation)
El sistema desarrollado por la compañía ABB utiliza un brazo móvil controlado por láser. Para recargar, este se erige para conectarse a un receptáculo en el techo de la marquesina. Del mismo modo, hay que señalar que no sólo de estas recargas cortas se alimenta TOSA, ya que aprovecha el inicio y el final de línea para cargar sus baterías al completo en un tiempo estimado de entre 3 y 4 minutos.
Las baterías compactas situadas en el techo nutren de energía al tren de tracción, junto al sistema de freno regenerativo del vehículo. Los 19 metros de TOSA dan la capacidad necesaria para albergar 135 pasajeros. Del mismo modo, ABB ha asegurado que su rango de emisiones de gases contaminantes es completamente nulo. La producción y distribución de la energía eléctrica que nutre el vehículo están también libre de emisiones.
Vía | ABB En Motorpasión Futuro | Tindo, el primer autobús solar del hemisferio Sur, Corea estrena dos autobuses eléctricos con sistema de recarga bajo asfalto