Finalmente este extenso culebrón ha llegado a su fin. Tesla y Panasonic han cerrado el acuerdo sobre la gigafactoría de baterías. Era vital que este proyecto llegase a buen puerto para los intereses del fabricante californiano. La nueva fabrica aumentará drasticamente las capacidad de producción de baterías necesaria para poder fabricar un mayor número de coches.
Al parecer Tesla será la encargada de construir y gestionar los terrenos, los edificios y otros servicios necesarios pero la parte asociada a la producción de celdas de litio: la compra de equipo industrial (máquinas, herramientas, etc...) correrá a cargo de Panasonic. Por último Tesla ensamblará esas celdas creando sus packs de baterías para utilizarlos finalmente en sus coches.
Según el acuerdo que han firmado las dos corporaciones la nueva fábrica tendrá una capacidad de producción flexible para adaptarse a la demanda de baterías de los próximos años ya que es difícil pronosticar con certeza cuantos coches será capaz de vender Tesla en los próximos años. De todas formas parece que la fábrica será escalable a medida que se vaya necesitando.
Otro punto vital de toda esta aventura empresarial es la reducción del coste de fabricación de las baterías que se conseguirá con la gigafactoría. Las economías de escala unidas a los nuevos procesos producctivos y a la mejora constante de la tecnología prometen una reducción importante.
Este puede ser un hito importante en la historia del coche eléctrico. Tesla y Panasonic van en serio con este proyecto. Están metiendo mucho dinero en ello con miras a vender coches eléctricos como churros en el futuro. Los nuevos proyectos de Tesla como el Tesla Model X o el Tesla Model III dependen directamente de que esta gigafactoría pueda proveer un número suficiente de baterías al precio adecuado.
Vía | Inside EVs
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