Coyote es una comunidad de conductores creada en Francia para compartir información sobre la ubicación de los radares y así plantarse ante el sistema de recaudación impuesto por el gobierno de su país. Cuando un conductor ve una incidencia, envía una señal a un servidor que la redistribuye al resto de los usuarios, conectados mediante la aplicación para smartphones iCoyote. Si esa incidencia es una retención, pues retención. Y si es un radar, pues... radar a la vista. ¿Cuestión de solidaridad?
En breve, R-Link de Renault contará con iCoyote instalado de serie en al menos el Renault Clio y el Renault Zoe. Y el año que viene PSA prevé incorporar la aplicación en el sistema Peugeot Connect Apps del Peugeot 308. Bastará con pulsar un botón en la consola para dar aviso de la ubicación de un radar móvil. Los radares fijos, se entiende que el navegador los consulta en la base de datos pública, como hacen tantos otros.
Coyote cuenta ya con 243.000 usuarios en España que han descargado medio millón de veces la aplicación iCoyote. En total, cuenta con 1,7 millones de usuarios entre Francia, Italia, Alemania, España y Bélgica. Hasta ahora, el aparato de Coyote costaba en España 199 euros y el usuario abonaba una cuota anual de 99 euros. Sin embargo, ahora cuesta 299 euros el aparato, pero sin cuotas. En tiempos de conectividad, las ráfagas de antaño - ahora prohibidas - se modernizan.
Vía | Cinco Días Foto | DiabloMotor En Motorpasión Futuro | Apple prohíbe las aplicaciones para iPhone que informan de puntos de control de alcoholemia (2011)