Preguntarnos sobre rentabilidad en el sector del vehículo eléctrico implica caer en la recurrente y clásica dicotomía entre oferta y demanda de: las ventas no se producen porque no hay infraestructura que las soporte; pero esa infraestructura no puede existir hasta que no la ampare un mercado suficientemente amplio. Esto, muy simplificado y aplicado a la red de recarga se concreta en: por qué el sector privado va a invertir en desarrollar una tecnología a gran escala si el mercado de vehículos eléctricos es todavía muy pequeño.
Rentabilidad, la palabra mágica para encontrar el vaticinado encendido provocado, y que la consultora Deloitte, que tiene entre sus negocios calcular los riesgos de nuevos negocios, ha utilizado para referirse a la red de recarga de vehículos eléctricos en Estado Unidos. Desde la consultora se ha concluido que vender electricidad puede resultar de provecho.
Así lo expone en un estudio en el que se han tratado de tener en cuenta todos los agentes que actualmente tienen que ver con el vehículo eléctrico en Estados Unidos. Si el sector público ha pagado la primera ronda, desde Deloitte concluyen en que una vez entonados aquellos interesados por vender electricidad tienen una oportunidad.
Uno de los pilares sobre los que se asienta el estudio es sobre la famosa ansiedad por la autonomía. La mayoría de particulares del país cargan sus vehículos eléctricos en la nocturnidad de sus domicilios, o en el trabajo. No obstante, en ese relación entre autonomía y recarga, concluyen en que la red de recarga va a jugar un papel crucial para calmar la ansiedad.
Rentabilidad y precios de la recarga
Volviendo a la rentabilidad, Deloitte ha realizado las correspondientes cábalas económicas en el hipotético caso de que las compañías eléctricas se sacudieran la timidez y decidieran apostar por el sector. Como no podría ser de otra manera, el punto controvertido reside en cómo cobrar la recarga. El sistema tarifario varía de unos estados a otros: en tan sólo 10 está establecido que terceras partes puedan entrar en el negocio mediante una tarifa que tiene en cuenta el precio real de mercado.
La alternativa pasa por ofertar una tarifa plana por horas, teniendo en cuenta sobre todo que más del 60% de los usuarios de coches eléctricos esperan a corto plazo bajar de las dos horas de tiempo de recarga. De este modo, la consultora ha predicho que con su plan de inversión la hora de barra libre de electrones debería cobrarse por encima de los 3'5 euros. Algo asumible para el consumidor en términos de reducir la mencionada ansiedad mediante tiempos de recarga que sólo podría encontrar es estas estaciones de servicio.
Vía | Plug-in Cars
En Motorpasión Futuro | Quién debe pagar el despliegue del vehículo eléctrico y Tipos de conectores, tipos de recarga y modos de carga