Robert Llewellyn, el protagonista de nuestra historia, ha viajado de Londres a Edimburgo en un Nissan Leaf 2013. Para los profanos en geografía anglosajona esto es como recorrer Inglaterra casi de norte a sur de sur a norte. El viaje, de poco más de 650 Km de distancia, le ha llevado a nuestro protagonista un total de 13 horas y ocho paradas para recargar.
En total se han recorrido una media de 81 kilómetros por carga, sin aplicar técnicas de conducción eficiente ni nada por el estilo. Se hizo una conducción normal y corriente sin renunciar a la calefacción, limpiaparabrisas o luneta térmica cuando era preciso, y eso que estos elementos siempre hacen mella en la autonomía del coche.
En cada parada, el Nissan Leaf estaba cargando durante 25 minutos o menos, siempre en postes de recarga rápida CHAdeMO, que afortunadamente para nuestro protagonista, ya están bastante extendidos por la geografía británica. El coste total del viaje fue de cero euros ya que, de momento, la red de cargadores es gratis.
El consumo energético del viaje fue de 121,58 kWh lo cual nos deja una media de consumo real de 18,5 kWh/100 Km. Al precio que está la electricidad en Reino Unido, habría supuesto un gasto de 20 euros. Con un vehículo convencional os dejo hacer a vosotros las cuentas. Una pista: allí la gasolina está ahora a 1,55€ y el gasóleo a 1,66.
Personalmente pienso que a los eléctricos todavía les queda camino por recorrer para ser un medio de transporte solvente en viajes largos. Historias como las de hoy nos demuestran que si quieres se puede hacer pero no nos engañemos. 655 Km en un coche convencional se pueden hacer con un solo tanque y en poco más de 6 horas. El viaje podrá costarnos tres veces más aproximadamente pero el tiempo que ganas bien lo merece.
Fuente | The LlewBlog
