Hoy hemos conocido de un nuevo estudio muestra que la movilidad eléctrica se terminará imponiendo durante la próxima década. El títular que nos traen McKinsey & Co. and Bloomberg New Energy Finance es que el 60% de los coches de las ciudades en 2030 tendrán motorizaciones eléctricas. Ahora bien, el panorama será algo más complejo de lo que se puede pensar.
Y es que los investigadores piensan que la electrificación seguirá concentrándose en zonas concretas del globo, y que el precio de los coches eléctricos seguirá siendo un obstáculo para una integración plena. De ahí que hablen que sean las ciudades de los países más desarrollados las que primero aumenten el tránsito de coches enchufables.
El estudio vincula demás otros factores bien conocidos al próximo auge de los coches eléctricos, como las políticas de reducción de emisiones en las ciudades, que será cada vez más estrictas; una tecnología mucho más barata y en general, el interés de más conductores.
Quizá lo más novedoso es que confirman que nuevos fenómenos como los servicios de coche compartido y las nuevas formas de movilidad urbana favorecerán sin duda al coche eléctrico en lugar que al de combustión. Esto además vuelve a poner en duda el futuro de la propiedad individual de los vehículos en las ciudades, algo para lo que deben prepararse los principales fabricantes si es que no quieren que las nuevas plataformas conquisten ese nuevo y crucial territorio (de ahí el sentido de pruebas como la de Nissan con Uber en Londres).
Vía | Automotive News Europe
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