El despilfarro al que nos tenía acostumbrados el mundo del motor hace décadas ha desaparecido casi por completo, ahora el ahorro de combustible no sólo es algo que vender al pueblo, es también una muestra de tecnología y desarrollo que se convierte en marca diferenciadora. Hoy en día todo en un vehículo está enfocado a ser lo más eficiente posible, y eso incluye incluso la instalación de luces LED.
La Comisión Europea ha certificado que los sistemas de iluminación LED de Audi son una tecnología que colabora en el ahorro de combustible y ofrece una reducción de emisiones de por encima del gramo por kilómetro. El estudio se realizó realizando diferentes pruebas y comparando los consumos entre modelos que tuviesen, o no, frontales LED.
La clave está en que a mayor gasto de batería, el provocado por las luces habituales frente a las LED pasando de 135 W a 80 W, el motor tiene que trabajar más, y pese a parecer algo demasiado ínfimo para ser considerado, el ahorro está ahí. Ahora lo interesante sería comprobar qué papel juega aquí la tecnología de luces láser frente a los LED, y es que tengo la ligera impresión de que, lo que aún a día de hoy tiene cierto halo de novedad, ya se nos está quedando anticuado.
Vía | GreenCarCongress
