Como parte de una estrategia lógica en la producción de automóviles eléctricos, Renault tiene proyectada la construcción de una fábrica de baterias de Lítio-Ion en las afueras de París. El proyecto inicial planteaba la apertura de la misma a finales de 2012, para reducir costes de producción y no depender de terceros en la fabricación.
Sin embargo, debido a problemas técnicos dicha fábrica podría ver retrasada su puesta en marcha hasta 2014 o incluso 2015. Según un portavoz del fabricante, este inconveniente no influirá en el calendario de lanzamiento de sus vehículos eléctricos, puesto que mientras tanto obtendrán las baterías del grupo AESC, una alianza comercial entre Nissan, NEC y la división química de LG.
No se conoce el motivo concreto del retraso, aunque el cambiante mundo de las baterías podría jugar a su favor si mientras tanto se desarrolla una alternativa al conjunto Litio-Ion, que dejaría a la nueva fábrica desfasada en caso de llegar demasiado pronto.
Via | Autoblog Green Fuente | Ward's Auto