Karma Automotive, el fabricante de automóviles californiano surgido en 2015 como reemplazo de Fisker Automotive tras su bancarrota, ha presentado en el marco del Salón del Automóvil de Los Ángeles 2019 el SC2 concept, un coche eléctrico biplaza capaz de completar el 0-60 mph (0-96 km/h) en menos de 1,9 segundos.
Aunque por el momento tan solo es una "demostración audaz de la aparición de Karma como una incubadora de movilidad de alta tecnología", en palabras de la propia marca, esboza las pretensiones ambiciosas del fabricante californiano dotando a su nuevo prototipo de cuatro motores eléctricos, dos en cada eje, capaces de desarrollar en armonía 1.100 CV y unos demenciales 14.000 Nm de par.
Traducido en la fase de aceleración de 0-96 km/h, el SC2 concept promete completarla en menos de 1,9 segundos, un guarismo espectacular con el pretende medirse de tú a tú con el Tesla Roadster, el hiperdeportivo cero emisiones que la compañía dirigida por Elon Musk pretende poner en el mercado el próximo año y que augura el mismo tiempo de aceleración desde parado.
En cualquier caso, y aunque el Tesla Roadster podría incluso mejorar esa cifra, ambos se quedan todavía lejos de los 1,69 segundos que homologa el Aspark Owl, un exclusivo coche eléctrico nipón que llegará a las carreteras en 2020.
En el caso del SC2 concept, a fin contrarrestar en cierta medida las salvajes prestaciones, Karma ha incorporado frenos carbocerámicos, una suspensión de deportiva, y una caja de cambios de vectorización de par.
La batería que montará será de 120 kWh, lo que le permitirá ofrecer una autonomía de hasta 350 millas (563 kilómetros) entre cargas. Por seguir con la analogía con el Tesla Roadster 2020, este último sí promete ser muy superior en cuanto a rango pues apunta a los 1.000 kilómetros, según la firma.
Estéticamente, el Karma SC2 concept apuesta por unas líneas afiladas, un capó alargado y una silueta enfocada a maximizar la carga aerodinámica y, por ende, estirar al máximo la autonomía. Tampoco faltan las siempre atractivas visualmente puertas en tijera.
Un interior de videojuego
"Al crear SC2, hemos mejorado la emoción de las sensaciones de conducción a través de tecnología patentada interactiva y conectada, más allá de la de un vehículo de lujo tradicional de alto rendimiento", explica la firma.
Y es que el habitáculo, al que se accede a través de huella dactilar y reconocimiento facial, presenta un espacio completamente tecnológico y vanguardista gracias a la inclusión del peculiar sistema Drive and Play, que permite al usuario recrear las experiencias de conducción realizadas en su propio coche para que "afine sus habilidades".
Para ello, un conjunto de cámaras y sensores proporcionan una captura 360 del entorno en 3D del automóvil en movimiento, y posteriormente un proyector láser adaptativo reproduce la ruta mientras el vehículo está estacionado, a la par que un smartphone acoplado en la cabina actúa como espejo retrovisor.
Además, estos radares, cámaras y el LIDAR con los que cuenta se utilizarán en el futuro para desarrollar un sistema de conducción completamente autónoma "segura y realista", detalla Karma.
Igualmente, en el interior resaltan, amén de la desaparición de los botones físicos en favor de un salpicadero completamente limpio, el volante rectangular, los asientos biométricos, que identifican al conductor y ajustan el puesto de conducción a sus preferencias y necesidades; un sistema de audio que crea zonas de sonido individuales, o el empleo de vidrio electrocromático para ajustar el nivel de opacidad de los cristales según deseen los ocupantes.
Por el momento, no hay confirmación oficial de que este futurista modelo vaya a llegar al mercado, aunque, de ser así, lo haría después del eléctrico Revero GT, que la marca prevé lanzar en EEUU en 2020, y de la nueva plataforma global en la que trabaja el fabricante de cara a 2021.
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