General Motors ha anunciado que invertirá en 2014 449 millones de dólares, algo más de 326 millones de euros al cambio, para preparar sus factorías para la próxima generación de vehículos eléctricos y para la investigación y mejora de nuevas baterías.
De esos algo más de 326 millones de euros, unos 279 millones de euros se invertirán en la mejora y actualización de los procesos de fabricación de la factoría de montaje de Detroit-Hamtramck, y unos 47 millones de euros se invertirán en la factoría de producción de baterías de Brownstown, ambas en el estado de Michigan.
Según indica General Motors, en la factoría a las afueras de Detroit se fabricará el nuevo Chevrolet Volt, y también otros dos futuros modelos eléctricos. Conviene recordar que el Chevrolet Volt, el Opel Ampera y el Cadillac ELR, eléctricos de autonomía extendida (híbridos enchufables para otros, según se mire), se fabrican en esta planta en exclusiva para todo el mundo.
Según declaraciones de Gerald Johnson, vicepresidente de fabricación de GM Norte América, estas inversiones "ayudarán en el desarrollo de la nueva generación del Chevrolet Volt para que siga siendo líder en propulsión eléctrica".
Esta factoría de Detroit-Hamtramck ya se actualizó hace no mucho para que sus procesos de fabricación fueran más sostenibles, al instalar más de 24.500 metros cuadrados de paneles solares fotovoltaicos.
En Brownstonwn la inversión será para la fabricación de la próxima generación de baterías de iones de litio y otros futuros sistemas de almacenamiento. En esta planta se fabrican actualmente las baterías del Chevrolet Volt (y primos) y del Chevrolet Spark eléctrico.
Desde el año 2009, y sumando la inversión anunciada para este año, entre diferentes factorías y centros de investigación de todo Estados Unidos, la inversión total de General Motors en electrificación, tecnología y eficiencia asciende a 5.400 millones de dólares, unos 3.929 millones de euros.
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