A pesar de que los coches impulsados por electricidad tienen fama de lentos y aburridos, son varios los ejemplos de que a pesar de ir contra los principios de eficiencia por los que se rigen las nuevas generaciones, estos pueden mostrar su lado más agresivo con unas prestaciones que le permiten alcanzar elevadas velocidades y fulgurantes aceleraciones gracias en parte a la entrega lineal de par de la que disfrutan este tipo de motores.
Un ejemplo es el prototipo de Peugeot bautizado con la denominación EX1, que parece nacido por y para los circuitos y que esta vez se ha enfrentado a todo un mito del asfalto, nada menos que el infierno verde, Nürburgring Nordschleife, donde ha marcado la mejor cifra que nunca ha logrado un coche eléctrico necesitando 9 minutos 1,388 segundos para recorrer los 25,3 kilómetros de su recorrido, con una media de 138,324 km/h.
Para lograrlo el EX1 ha tenido que sacar el máximo a los 250 kW de potencia procedentes de sus dos motores eléctricos, que le permiten alcanzar los 260 km/h y todo ello con un peso de solamente 750 kg. Por su parte el pack de baterías de litio tiene una capacidad de 30 kWh y, de la que nos encantaría conocer el nivel de carga al finalizar una prueba desarrollada a un ritmo extremo.
El anterior poseedor de esta simbólica distinción era el BMW ActiveE, la versión eléctrica del Serie 1, que había logrado también bajar de los 10 minutos parando el crono en 9,52 minutos, una cifra excelente teniendo en cuenta que dispone de exactamente la mitad de potencia del EX1, 125 kW.
A pesar de la imparable evolución, a las motorizaciones eléctricas todavía le queda mucho camino por recorrer para alcanzar al actual campeón de Nurburgring Nordschleife en coches de calle, y es que los 6 minutos y 47 segundos del Pagani Zonda R quedan aún muy lejos, pero es cuestión de tiempo.
Vía | Motorpasión
Fuente | Peugeot
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