Las baterías otra vez, ese parece el pan nuestro de cada día a la hora de hablar de vehículos eléctricos. Hoy os hablamos del reciclado de las baterías de litio; un negocio rentable, en el cual se desecha el propio litio de las mismas. Esto puede parecer una incongruencia, pero económicamente es así. El precio del litio es de alrededor de 6 euros por kilogramo, lo suficientemente bajo como para que no exista un movimiento privado a favor del reciclaje.
A día de hoy, cuando mandamos nuestras baterías de litio a reciclar, los metales que se extraen de las baterías son aquellos más valiosos, como el cobalto. El cobalto se utiliza en las baterías de ion litio, de donde luego se extrae en forma de óxido de cobalto y litio, con un precio de 19 euros por kilo, más de tres veces el precio en el mercado del litio.
Debido al bajo precio del litio, que se espera se mantenga estable gracias a los nuevos yacimientos encontrados en Bolivia, su recuperación de las baterías usadas no supone un aliciente empresarial, dejándolo como un simple relleno para el hormigón, imposibilitando de esta manera su futura recuperación y utilización.
La verdad es que los fabricantes han comenzado a tomar cartas en el asunto. Hemos visto como General Motors intenta buscar nuevas utilidades a las baterías usadas de los Volt, o cómo Toyota buscaba alianzas para reciclar las baterías de sus híbridos en Europa. Pero reciclar el litio sigue sin ser económicamente rentable.
¿Deberían los fabricantes encargarse del coste de reciclar el litio? ¿O tendríamos que ser los consumidores los que pagáramos una ecotasa por ello? Algo parecido podemos decir de los neumáticos, en ellos cuando los desechamos hemos de pagar una tasa para su reciclaje. Las baterías de litio se utilizan desde móviles a coches, y su uso no hace más que aumentar.
Aunque por ahora el litio parezca un material abundante, sus usos industriales fueron más que limitados, y es posible que no dispongamos de mucho litio a bajo precio. Ya hemos visto como podríamos sacar litio de las aguas marinas, pero también sabemos que la minería del litio puede causar impactos severos en el hábitat de muchas comunidades indígenas, así como en el medio natural, y mediante el reciclaje este impacto se minimizaría.
Soy un fiel defensor del reciclaje y del aprovechamiento de los recursos, y en este caso no estamos ante un problema técnico que nos imposibilita reciclar el litio, sino ante un dilema económico. Yo creo que se debería obligar a los fabricantes de baterías, o a los usuarios mismos, a reciclar todo el litio de las baterías, así como otros elementos de las mismas.
El plomo hace años que se recicla, de hecho el 98% del plomo usado en el mundo es reciclado. ¿Por qué no empezar desde ahora con el litio? Puede que en un principio económicamente no nos salga rentable, pero cercano a todos es el caso del cobre. Con el cobre pasamos de disponer de cantidades en abundancia a simplemente empezar a darnos cuenta de que escasea y lo necesitamos cada vez más. Pues bien, cada vez que se tiraba un cable de cobre se elimina una parte de material que no puede ser reutilizado, material que en un futuro nos hará falta.
Vamos hacia un mundo con cada vez mayor escasez de recursos naturales, si encima desperdiciamos aquellos que nos son útiles llegará el punto en que no dispongamos de los mismos. Si ahora nos quejamos de que las baterías son caras con litio abundante no quisiera yo saber que pasaría si el litio comenzase a escasear porque lo hemos derrochado en hormigonar.
Vía | Plug in Cars
En Espacio Renault Z.E. | ¿Será el litio un metal clave para el futuro de la movilidad eléctrica?
En Motorpasión Futuro | El precio del litio podría bajar gracias a nuevos métodos de producción, Toyota encuentra cuatro veces más litio en Argentina del esperado,