El futuro BMW i5 ha regresado con fuerza a los mentideros de la movilidad eléctrica. Si hace un mes os contábamos que el fabricante alemán había retomado el proyecto y de que ya se hablaba de un 100% eléctrico con 400 kilómetros de autonomía en condiciones reales para 2020, hoy seguimos dando fe de ese flujo de información que continúa vivo dentro de BMW.
En ese aspecto, el blog de BMW indica, que según varias fuentes internas, el diseño del BMW i5 será muy diferente a lo que hemos visto hasta ahora para la serie i. Es decir, que se alejará de un diseño revolucionario como lo intentado con el BMW i3, y tampoco se acercará a la deportividad del BMW i8.
Más bien, tendrá un aspecto similar a las líneas convencionales de los modelos térmicos de BMW. En cuanto a su segmento, también está por definir, aunque según el jefe de ventas de BMW, Ian Robertson, el BMW i5 será "más grande que pequeño" y su pack de baterías de nueva generación "tendrá que ser alojado de modo que otorgue al coche ciertas proporciones". De ahí que incluso las palabras SUV o crossover se contemplen para el mismo.
En cualquier caso, cada vez está más claro que BMW necesita un nuevo impulso eléctrico para no quedarse atrás. No lo decimos nosotros, sino ellos mismos. Y es que después de colaborar con Tesla, los alemanes se han sumado a sus compatriotas en tendencias "Teslofofas". Así lo podríamos definir teniendo en cuenta que la compañía ya celebra encuentro con sus empleados en los que se dice que BMW ha perdido el liderazgo en innovación y se alerta, con fotos de Elon Musk de fondo, del asalto eléctrico que están viviendo.
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