Y quien dice cartero dice repartidor de empresa de transportes. Y es que cuando uno realiza una compra por Internet y espera recibirla por correo o bien por transportista, lo normal es indicar como dirección de entrega el domicilio. Pero claro, algunas personas que están poco tiempo en su casa y la mayor parte del día fuera, ya sea trabajando, ya sea en la universidad, se encuentran con el problema de no poder estar presentes cuando llega el reparto.
Y esto lo entenderán bastante bien aquellos que vivan solos o bien aún viviendo en pareja, resulte que ambos trabajan y están fuera de casa. No hace mucho podía ser un recurso dejar el recado al vecino de confianza de enfrente para que lo recogiera en nuestro lugar, pero ahora no se tercia mucho esta solución. Si por el contrario uno indica que se pasará a recoger el envío por la oficina de la empresa de transporte de turno, pues puede suceder (casi seguro) que su horario de trabajo coincida con el de apertura de la oficina en cuestión.
Así que recibir esa compra que esperamos con ilusión a veces es un pequeño problema. Pues bien, alguien ha encontrado una solución: entregar el pedido en tu coche. Sí, en lugar de especificar tu domicilio, el cartero o el repartidor entregarán el pedido en tu coche, y además ni siquiera es necesario que estés presente cuando lo hagan. Esto es lo que propone la empresa Cardrops. Vamos a explicarlo en detalle.
Cardrops: GPS y apertura electrónica
Lo primero que hay que tener presente es que Cardrops es una empresa de transporte urgente como cualquier otra (Seur, DHL, UPS, TNT y tantas otras). Su particularidad es que en lugar de entregar en una dirección física (un domicilio) entregarán el envío en nuestro coche.
Para ello quien desee recibir pedidos y compras así tiene que darse de alta en el servicio de Cardrops. Se registran sus datos personales y su coche (marca, modelo y matrícula). Como con cualquier servicio de transporte hay que pagar por los portes. En este se ha creado una tarifa de 4,95 euros por entrega (servicio Rockstar) o bien una tarifa plana de 24,95 euros al mes para infinitas entregas (servicio Royal).
Para que Cardrops pueda entregar el paquete en el coche es necesario instalar en él un dispositivo, que incluye un módulo GPS, para poder localizar el coche y que el repartidor pueda encontrarlo, y un módulo de apertura electrónica de las puertas del coche, para abrir el maletero.
Quien opte por el servicio Rockstar tiene que pagar 99 euros para tener ese kit inicial, mientras que quien opte por la tarifa plana mensual, no tiene que pagar por él. Este kit se encarga de instalarlo personal de Cardrops.
Como es obvio, el coche debe estar aparcado en un lugar que sea accesible al repartidor (nuestro garaje cerrado a cal y canto no sirve). En general será la calle, o en lugares donde no se pierda la señal GPS. Los repartidores de Cardrops podrán entregar tanto de día como de noche, por ejemplo mientras dormimos, nuestra compra en nuestro coche.
La central de reparto de Cardrops monitoriza el histórico de ubicaciones de nuestro coche de acuerdo al GPS, para hacerse una idea de dónde suele estar el coche y a qué horas del día, para así poder organizar mejor los repartos. De todos modos el módulo GPS solo transmite la posición del coche una vez que este lleve más de 15 minutos detenido.
Así que cuando haya que entregar el pedido, el repartidor de Cardrops es guiado por el sistema GPS del furgón de reparto hasta donde está nuestro coche, se acerca a él y con su PDA abre el maletero. Nos deja dentro el paquete, y lo cierra de nuevo con la PDA. Es por eso que el coche tiene que tener cierre centralizado, para que funcione la apertura y cierre electrónicos.
Una vez entregado el paquete se envía un mensaje de texto sms al teléfono móvil del cliente. Si este tiene un smartphone, puede instalar también una aplicación específica con la que consultar y rastrear el estado del envío de su pedido.
Como es lógico, este servicio de reparto está pensado para objetos no muy grandes que puedan caber en el maletero del coche, que vienen a ser los más habituales de las compras que se realizan por Internet: ropa, libros, películas, videojuegos, una cámara de fotos, un teléfono, etc. No está pensado por ejemplo para una lavadora ni otros electrodomésticos grandes.
Para dar mayor seguridad a los usuarios de este servicio, y por si acaso pudiera suceder algo a los coches, Cardrops tiene contratadas pólizas de seguros para cubrir imprevistos y daños. Detrás de Cardrops se encuentra la consultora asentada en Bélgica Board of Innovation. Algunos de los clientes para los que ya ha trabajado son eBay, Cisco, Volkswagen o La Poste.
¿Qué os parece el sistema? ¿Nos lo traemos a España?
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