El gobierno aprobó en el último Consejo de Ministros un plan de ayudas e incentivos a la compra de vehículos eléctricos. Este plan, llamado MOVES, está dotado de un presupuesto de 45 millones de euros. Las ayudas serán de 5.000 euros para la compra de automóviles y furgonetas ligeras. Los fabricantes, importadores de vehículos o puntos de venta deberán aplicar, además, un descuento mínimo de mil euros en la factura, excepto para las compras de cuadriciclos y motos.
El plan MOVES no solamente contempla ayudas para la compra de un coche eléctrico. También se darán ayudas de 700 euros para motos eléctricas y de 15.000 euros para la compra de camiones y autobuses con propulsión alternativa, en este caso hablamos de vehículos que funcionen con gas natural.
Por otra parte, se incluyen ayudas para puntos de recarga y demás infraestructuras (ya sean de uso público o privado) y sistemas de préstamos de bicicletas eléctricas. En estos casos las ayudas serán de un 30 % o un 40% del coste subvencionable, dependiendo del tipo de beneficiario. En cualquier caso, se ha fijado un límite de 100.000 euros.
En los casos de que el beneficiario destinase esa ayuda para la implantación de Planes de Transporte a los Centros de Trabajo, la ayuda sería del 50% del coste subvencionable con un límite de 200.000 euros por beneficiario.
Dentro del plan MOVES hay una línea adicional de 15 millones de euros que se dedicará a apoyar proyectos singulares de movilidad eléctrica en ciudades patrimonio de la humanidad o islas.
Cualquiera puede ser beneficiario de las ayudas MOVES. Personas físicas, autónomos, comunidades de propietarios, empresas privadas, entidades locales y las entidades públicas vinculadas a ellas, e incluso las administraciones de las comunidades autónomas y hasta entidades públicas de la Administración General del Estado podrán acogerse al plan de ayudas.
Las comunidades autónomas gestionarán las ayudas del plan MOVES
Las comunidades autónomas serán las responsables de la gestión y de realizar las convocatorias en sus respectivos territorios. Aún no sabemos cómo se repartirán las comunidades autónomas esas ayudas (el criterio de reparto se consensuará en las próximas semanas en la Conferencia Sectorial de Energía).
Una vez que cada comunidad tenga asignado un presupuesto, ésta deberá destinar entre un 20% y un 50% a la adquisición de vehículos alternativos; y entre un 30% y un 60% a la implantación de infraestructuras de recarga. De este último porcentaje, un mínimo del 50% ha de dirigirse a puntos de recarga rápida o ultrarrápida.
Por último destacar que el adelanto electoral no afectará a la puesta en marcha de estas ayudas, ya que el plan MOVES se pone en marcha vía Real Decreto y por ende no tiene rango de ley y no requiere convalidación parlamentaria.
El rechazo parlamentario a los Presuspuestos Generales del Estado no afecta al Plan MOVES ya que la partida de 45 millones destinada a MOVES fue consignada al IDAE en los presupuestos de 2018 con el objeto de financiar “actuaciones de apoyo a la movilidad basada en criterios de eficiencia energética, sostenibilidad e impulso a energías alternativas, incluida la disposición de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos”.
Por su parte, la línea de 15 millones dedicada a presupuestos singulares proviene de una partida finalista de 10 millones asignada para tal fin al IDAE en los presupuestos de 2017, y que no fue ejecutada en su momento, y una segunda partida de 5 millones prevista en los presupuestos del pasado año.