Bosch ha dado con un sistema Start-Stop que perseguía el mismo objetivo que el de Hella, sobre el que os hablamos hace más de un año. Hasta hace relativamente poco, la tecnología de Start-Stop sólo era aplicable durante paradas o a velocidades ínfimas, por eso, el curso de las investigaciones se centró en encontrar un sistema que permitiera también aprovechar la energía acumulada durante esas etapas en las que no requerimos el esfuerzo de nuestra motorización.
Con esta solución de Start-Stop es posible conducir a vela, es decir, apaga el motor de combustión y lo desacopla de la transmisión, en el momento en el que el vehículo puede mantener su velocidad al rodar por inercia.
El motor volvería a arrancar en el momento en que recibiera un estímulo por nuestra parte, pisando el freno o el acelerador. Desde Bosch se afirma que durante el 30% del tiempo de duración de la mayoría de viajes largos no se requiere expresamente la fuerza del motor. De aplicarse su sistema, este podría contribuir a un aumento de la eficiencia en torno al 10%, con el consecuente ahorro en el consumo de combustible.
Bosch ha diseñado este nuevo sistema para que reste las mínimas prestaciones al vehículo y para que se pueda integrar con la mayoría de carburantes. Gran parte del logro del nuevo sistema se debe a su mejora informática, es decir, a la de su software.
Precisamante, es en esta área donde más se han centrado los esfuerzos, de cara a canalizar más eficientemente la información que llega desde los sensores del vehículo para determinar aquellos momentos en los que podemos rodar con la transmisión desconectada.
En Motorpasión Futuro | Ford implantará el Start-Stop en el 70% de sus modelos, Ocho millones de coches con start-stop en EE.UU. para 2017