Un grupo de investigadores de BASF y de la Universidad Justus-Liebig de Giessen, en Alemania, han avanzado positivamente en el desarrollo de unas baterías de sodio-aire (superóxido de sodio) con una densidad energética por encima de los 1.600 Wh/Kg, unas diez veces mayor que la de las actuales baterías de iones de litio.
Dado el avance BASF ya ha solicitado la patente provisional en los Estados Unidos para seguir desarrollando este tipo de baterías metal-aire (metal-oxígeno). Este es el más deseado para el futuro de los automóviles eléctricos, de hecho fabricantes como Toyota también están investigando al respecto, con La batería de Sakichi, capaz de almacenar más energía que la gasolina.
Pensad que una densidad energética diez veces superior significaría que en el tamaño y peso de las baterías convencionales de iones de litio de hoy en día, entre 250 y 300 kg, como las de un Renault Fluence Z.E. o un Nissan LEAF, tendríamos teóricamente una autonomía del orden de 1.750 a 2.000 km (en lugar de 175 a 200 km como tenemos ahora).
Estas baterías de metal-aire de BASF son similares a otras que también investigan otros grupos de trabajo como las baterías de litio-aire, con la ventaja de no depender del litio, cuya disponibilidad y cantidad a futuro no está muy asegurada.
La celda básica de esta batería consiste en un ánodo de sodio metálico, un separador de fibra de vidrio y un cátodo de fibra de carbono que funciona como lámina de difusión de gas. El electrolito es una solución de sal de sodio en dietilenglicol dimetil éter.
Todavía hay que investigar un poco más para poder tener baterías de este tipo viables en un uso real, sobre todo en lo que respecta a ciclabilidad y vida útil, pero BASF se muestra muy esperanzada.
Vía | Green Car Congress En Motorpasión Futuro | Las baterías de Zinc-Aire ofrecerían más autonomía, menor precio y llegaría el próximo año al mercado