Amazon ha anunciado la incorporación de un centenar de furgonetas eléctricas a la flota de sus socios de reparto y la instalación de 80 nuevos puntos de carga en una de sus estaciones logísticas en Madrid, que ya contaba con 72 cargadores.
Se espera que a principios de 2021 estén listas las primeras 10.000 furgonetas eléctricas que ha encargado a Rivian, la start-up mejor financiada del mundo y que sin embargo aún no ha empezado a fabricar ningún vehículo. Y no lo hará hasta finales de año.
Más centros logísticos en camino para hacer frente a la demanda
Ahora, el centro de San Fernando de Henares, en Madrid, será el que tenga mayor número de puntos de carga de España, con más de 150 cargadores a finales de este año.
Para hacernos una idea del tamaño de la red logística de Amazon en España, en 2019 aumentó su fuerza laboral a 7.000 empleados, sin contar con las compañías de reparto independientes con las que colabora, además de su red Amazon Flex, formada por autónomos que utilizan sus propios vehículos para los repartos.
A lo largo de los últimos siete años, la compañía ha abierto cuatro centros logísticos ubicados en El Prat (Barcelona), Martorelles (Barcelona), Castellbisbal (Barcelona) e Illescas (Toledo), además de dos centros logísticos urbanos en Madrid y Barcelona y otras 11 estaciones logísticas ubicadas por todo el país.
Además abrirá un nuevo centro logístico en Alcalá de Henares (Madrid) que podría generar hasta 500 puestos de trabajo en tres años, según la multinacional.
De ahí la inversión de 440 millones de dólares en 100.000 furgonetas eléctricas Rivian como forma de reducir las emisiones del transporte.
Amazon planea comenzar a utilizar estos nuevos vehículos eléctricos para entregar paquetes a los clientes en el año 2021, con los primeros 10.000 nuevos vehículos ya en circulación a comienzos de 2021 y los 100 000 vehículos disponibles para el año 2030.
Las furgonetas se producirán en la planta de Normal (Illinois, EEUU), una factoría comprada por Rivian en 2017 a Mitsubishi.
Lo cierto es que la start-up, capitaneada por RJ Scaringe aún no ha empezado a fabricar ni sus propios modelos, la pick-up eléctrica R1T y el SUV R1S, debido a la pandemia global del coronavirus.
Los dos esperados vehículos debían empezar su producción a gran escala a finales de este año, aunque trabajan para "minimizar la interrupción de los planes de lanzamiento" a medida que asimilan el alcance de esta crisis.
Por otro lado, el gigante del comercio electrónico instalará al sureste de Sevilla una granja solar que promete proporcionar 149 megavatios de energía renovable y se espera que genere más de 300.000 MWh al año para la red logística y los centros de datos de Amazon Web Services en el país.
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