Fabricantes y startups de coches eléctricos hay muchos. Y cuando hablamos de coche eléctrico es casi imposible no mencionar a Tesla en algún momento. Muchas veces es considerado un fabricante disruptivo, sin embargo Fisker Inc. podría ser finalmente el verdadero fabricante disruptivo, al menos según un artículo de Business Insider.
A priori, Tesla es disruptiva porque ha sacudido los cimientos de la industria automotriz demostrando que fabricar y vender coches eléctricos puede ser viable económicamente para una empresa. Ya sea impulsadas por las normas de diferentes mercados o por oportunismo, los grandes fabricantes se han puesto las pilas y fabrican ahora también coches eléctricos, con mayor o menor suerte.
Eso sí, le ha llevado algo más de una década alcanzar beneficios, pero los mercados financieros creen en Tesla y el valor de la empresa en capitalización bursátil vale más que el grupo Toyota y los siguientes seis fabricantes japoneses juntos. Una barbaridad, aunque ya sabemos que la capitalización bursátil no siempre es el reflejo de la realidad industrial.
¿Es Tesla disruptiva?
Pero, ¿es Tesla disruptiva? Para Business Insider, en apariencias. En cambio si bien consideramos que en algunos aspectos sí es disruptiva, como en la manera de comunicar y vender sus coches, no lo es tanto a nivel productivo. Y ahí es donde coincidimos con la tesis de Business Insider, Tesla no lo es porque en el fondo aunque se presente como una empresa tecnológica fabrica y vende coches.
Según Clayton Christensen, se podrían "usar muchas características para describir a Tesla. Son muy creativos. Entienden que es necesario realizar trabajos. Su tecnología es muy buena. Pero no consideraríamos a Tesla como algo disruptivo. Están tratando de hacer mejores productos aún mejores. Nuestro modelo es muy, muy claro en este tema".
Clayton Christensen, que murió en 2020, era un profesor de la Escuela de Negocios de Harvard que en 1997 escribió el libro más importante y citado sobre este tema, 'The Innovator's Dilemma: When New Technologies Cause Great Firms to Fail'.
Tesla se limita, digamos, a hacer lo mismo que los demás, pero mejor. Es decir, Tesla lo fabrica todo y apenas recurre a grandes proveedores exteriores. Los motores y los chasis son Tesla, así como lo son las baterías, aunque fabricadas con un socio de referencia, lo son específicamente para Tesla con una tecnología y química propias. Es tal y como funcionan los fabricantes tradicionales, como lo hacen todos, desde Alfa Romeo hasta Volvo.
Sin embargo, el enfoque de Fisker Inc. es muy diferente. Fisker Inc. es la actual empresa fundada por Henrik Fisker tras verse obligado a vender Fisker Automotive en 2013. Inicialmente, Henrik Fisker pensaba volver a lo que le hizo famoso, diseñar coches (es autor del BMW Z8 y del Aston Martin V8 Vantage, por ejemplo). Sin embargo, pronto decidió volver a intentar fabricar sus propios coches.
Fisker Inc., el modelo de negocio de Apple aplicado al automóvil
Aunque esta vez no los fabricará realmente. El SUV Ocean y que tanto promociona, contará con una plataforma genérica desarrollada por Magna Steyr, la mayor subcontrata y fabricante de automóviles. En la factoría de Graz, Austria, fabrican coches tan dispares como el Mercedes Clase G, el Jaguar i-Pace o el BMW Serie 5. Realizaron también el prototipo del coche eléctrico de Sony, el Vision-S.
Al subcontratar la mayor parte del desarrollo (baterías, motores, chasis) y la fabricación, la inversión es menor, los riesgos calculados y Fisker podrá ofrecer un producto más barato. La amrca mantiene el objetivo de un Fisker Ocean por 37.500 dólares en Estados Unidos.
Siguiendo esa lógica, Fisker prepara un nuevo modelo para 2023, el 'Project PEAR'. Está vez sería sobre la base de la plataforma de coche eléctrico desarrollada por Foxconn, la empresa que fabrica los iPhone para Apple. Fisker cree con esta estrategia, la flexibilidad de su modelo de negocio ayudará a que la empresa sea relevante y luego se mantenga, es decir, que sea viable y rentable.
El usar componentes de otros fabricantes no es algo nuevo en la industria. Marcas de lujo lo llevan haciendo desde hace décadas, como Morgan, que usó motores Rover, Ford y ahora usa motores BMW, o Aston Martin en la actualidad, que usa el V8 4.0 litros AMG y todo el sistema de infoentretenimiento de Mercedes-Benz. Pero son pequeños volúmenes de producción y los chasis siguen siendo propios. En el caso de Fisker, casi todo provendría de fuera, salvo y el diseño y la marca. Sería llevar el modelo de negocio de Apple al automóvil.
De momento, hemos de reconocer que Tesla es lo más parecido a una empresa realmente disruptiva, más que nada porque sí vende coches. De momento, no el caso Fisker Inc., pero si finalmente el modelo de negocio de Fisker funciona, sí podría ser el verdadero disruptivo.
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