Demasiado mayor para pagar un coche eléctrico. Varios compradores que superaban los 75 años se han topado con un estupendo portazo edadista tras acudir al concesionario.
En todos los casos la negativa ha venido de la misma financiera, y todos ellos optaron por la fórmula del alquiler de particulares. La entidad, especializada en arrendamiento de coches, niega que la edad sea motivo para denegar un contrato. La normativa general europea prohíbe la discriminación por edad.
"Desafortunadamente, nuestro límite de edad para alquilar un coche es de 73 años"
Esta opción de "compra" está cada vez más extendida: por una cuota mensual fija se disfruta de un coche durante los años que se contrate. Ha servido a las marcas para contar con una alternativa de venta, y a su vez permite que los clientes no se aten a un coche ante un panorama normativo aún incierto en Europa. Con los coches eléctricos es buena opción, por su mayor depreciación.
Es precisamente a la que se quiso atener Seppo Ukonaho, de 77 años y residente en Raahe (Finlandia). El pasado verano acudió a un concesionario y optó por un Hyundai Ioniq 6. En un primer momento no le pusieron problemas, pero días después recibió la negativa de la financiera, Arval Suomi.
"Nos llegó una carta a casa indicando que no se podía hacer un contrato de alquiler de particulares. Nos preguntábamos qué pasaba cuando no teníamos deudas ni impagos". Tras ponerse directamente en contacto con Arval, la respuesta fue meridiana: su edad era la traba. De hecho, le aconsejaron que "hiciera el contrato a nombre de un familiar más joven". Por ejemplo, su hijo, aseguró al medio finlandés Ilta Sanomat.
Ukonaho no ha sido el único en sufrir, supuestamente, este edadista trato. Esta misma publicación recoge el testimonio de otro anciano, Timo Haahti, de 79 años y residente en Nurmijärvi. También fue en un concesionario de Hyundai: escogió un Hyundai Kona Eléctrico, asimismo por alquiler de particulares. El propio vendedor le advirtió que no se aceptaba dicho contrato "para personas de esa edad".
Igualmente ha sido el caso de Monica Ulfhielm, jubilada de 82 años y residente en Estocolmo (Suecia). Ulfhielm quería cambiar de coche eléctrico, que, curiosamente, había contratado con el formato de alquiler particular. Tampoco le pusieron problemas en el concesionario, con el que formalizó el contrato. Pero días más tarde, recibió el portazo de la financiera, también Arval.
"Desafortunadamente, nuestro límite de edad para alquilar un coche es de 73 años. Por lo tanto, lamentablemente no podemos continuar con la solicitud. Necesitaríamos otro solicitante para avanzar con el proceso", rezaba la comunicación. Con ello se entiende que sí se la habrían concedido si fuera a nombre de alguien más joven.
Ulfhielm, muy indignada, volvió a concesionario. Se mostraron muy sorprendidos por la contestación de la entidad: "Nunca habían oído hablar de una norma así". Optó por denunciarlo ante el Defensor del Pueblo, por discriminación por edad.
"Entiendo perfectamente que una entidad de crédito evalúe mis finanzas antes de poder firmar un contrato de alquiler. Pero en este caso no se evaluó mi situación financiera, sólo mi edad. Es inaceptable", señala a Senioren.
"No existe ningún límite de edad que nos impida otorgarlo". Arval es la entidad que en los tres casos se ha negado, según los tres compradores mayores de 73 años, a formalizar con ellos un contrato de alquiler. Opera en varios países, incluyendo España. Pertenece al gigante bancario Groupe BNP Paribas.
Desde esta firma han negado al citado medio finlandés que discriminen por edad para conceder esta clase de contratos. Defendieron que la evaluación de Ulfhielm se debió a la incorrecta interpretación de sus condiciones de un empleado "recién contratado".
Ulfhielm recibió una disculpa por parte de esta firma. Poco después, su denuncia fue desestimada: exigieron más pruebas que demostraran que se trataba de un caso de discriminación por edad.
"Al tramitar una solicitud de crédito, no discriminamos a nadie por motivos personales y no existe ningún límite de edad que nos impida otorgarlo", asegura Teemu Tetri, responsable de consumo de Arval en Finlandia. No obstante, declinaron hacer comentarios de los casos individuales de ambos compradores por privacidad. Desde Hyundai Finlandia igualmente aseguran que no hay restricción alguna por edad para este tipo de contratos.
Desde hace varios años, la jurisprudencia europea recoge entre sus supuestos la discriminación basada en la edad, que no está permitida. Y por tanto es denunciable.
"La edad de una persona no puede ser motivo para denegar un préstamo. Sin embargo, es importante recordar que nadie tiene un derecho subjetivo a recibir un préstamo". Pero Ulfhielm pudo contratar este servicio con 77 años de edad en Estocolmo, aunque no indica si a la misma entidad. Tampoco se detalla la duración del contrato que solicitaron estos tres compradores a los que supuestamente se les negó.
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