La nueva generación del Citroën C4, en la que ha mutado de compacto a SUV, aterrizó en el mercado español en septiembre, pero su familia no estaba completa: quedaba por llegar el propulsor de mayor entrega, con 155 CV. Esta versión mecánica ya puede seleccionarse y se convierte en la más aspiracional de la gama.
Eso sí, únicamente está disponible en el acabado Shine, que es el más completo de los tres con los que se ofrece el nuevo C4 en España. Su precio arranca en los 27.519 euros en comparación a los 21.699 euros de los que parte su opción más básica Feel con el motor gasolina de 130 CV.
Solo con cambio automático
Esta mecánica ya anunciada pero que aún no había desembarcado en España es la PureTech 155, un bloque de 1.2 litros, que rinde 155 CV y 240 Nm de par disponible desde las 1.750 vueltas. Pero a diferencia de la PureTech 130, solo puede asociarse a la caja automática EAT8 de ocho relaciones.
Con este corazón, el Citroën C4 firma una velocidad máxima de 208 km/h y hace el 0-100 en 8,5 segundos, mientras que con el motor gasolina de 130 CV y el diésel BlueHDi de idéntica potencia tarda en firmarlo 9,4 y 9,5 segundos respectivamente. Eso sí, la punta que ofrece este motor es algo menor, con los otros dos promete llegar a los 210 km/h.
En lo que respecta al consumo y emisiones es el menor ahorrador de los C4: homologa en WLTP un gasto de 5,8 l/100 km en ciclo mixto y unas emisiones de entre 131 y 145 g/km de CO₂. Esto supone un litro más que el gasolina de acceso con caja automática y dos litros más que la variante de gasóleo, también con cambio EAT8.
Sea como fuere, el rey en clave eco de la gama es el Citroën ë-C4, su versión eléctrica, que equipa un propulsor de 100 kW (136 CV) y 260 Nm, que toma su energía de una batería de 50 kWh y promete una autonomía de 350 km.
¿Qué equipa de serie?
Estando únicamente disponible en el acabado Shine, este Citroën C4 incluye el equipamiento más completo en términos de diseño, confort, conectividad y seguridad.
Entre sus bondades encontramos llantas de aleación de 18 pulgadas en diseño Aeroblade diamantadas, lunas traseras tintadas, el pack Color Gris Texturé para los airbump y los marcos de los faros antiniebla delanteros o, en el interior, los asientos Advanced Comfort y la tapicería Metropolitan Grey.
Todo ello se suma a los retrovisores exteriores abatibles eléctricamente, la climatización bizona, la cámara de visión trasera, el acceso y arranque manos libres, las levas de cambio en el volante o el head-up display a color que ya ofrece en acabados anteriores.
En lo que respecta a sistemas de asistencia a la conducción añade detector de ángulo muerto, faros inteligentes SmartBeam con asistente de luces de carretera, control de crucero con función stop & go, ayuda al estacionamiento delantero o sistema de reconocimiento de señales de tráfico.
Estas tecnologías se suman a la frenada automática de emergencia, al regulador y limitador de velocidad y los sensores de estacionamiento traseros ya disponibles en versiones menos completas.
Y en lo que toca a conectividad, encontramos un display multimedia de 10 pulgadas equipado con navegador y el sistema Connect NAV, que cuenta con información del tráfico en tiempo real así como de gasolineras, párkings, meteorología y puntos de interés locales.
Son opcionales la carga inalámbrica para dispositivos móviles, la cámara 360º, el techo solar practicable o el sistema de mantenimiento de carril en combinación con el control de crucero.
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